El esfuerzo medio para adquirir una vivienda, la ratio que relaciona el precio medio del mercado residencial con los ingresos de las familias, supera el 40%, unas cotas no alcanzadas desde 2014, según el estudio publicado por la tasadora UVE Valoraciones, a partir de datos del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana (MIVAU), Catastro y el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los motivos detrás de este endurecimiento en la accesibilidad a la vivienda, según UVE, son dos: la «subida de los tipos de interés» y, en el caso de las localidades con un componente turístico, la «compra de inmuebles por parte de personas que no residen permanentemente en él».