Según informa The Daily Mail, se encontraban cerca de Adelaide Cottage, en Windsor, después de haber visto a sus tres hijos (George, de 10 años, Charlotte, de ocho, y Louis, de cinco) en acontecimientos deportivos.
Un testigo, que vio a la pareja, confesó a The Sun : «Después de todos los rumores que habían estado circulando, me quedé atónito al verlos allí». Kate estaba de compras con Guillermo y parecía feliz y bien. «Los niños no estaban con ellos, pero es una buena señal de que estaba lo suficientemente sana como para ir de compras».
No se filtró ninguna fotografía de la pareja, cumpliendo son su deseo de privacidad en estos meses de recuperación. Esta aparición, pese a ser extraoficial, es una clara señal del regreso progresivo de Kate a la vida pública.
Según confirmó la casa real británica, Kate debería retomar formalmente sus funciones públicas el próximo 17 de abril, aunque según informa también The Daily Mail, podría regresar antes e incluso podría ser vista entrando al servicio anual de Pascua, celebrado en la Capilla de San Jorge.