Unas 130 personas se han concentrado este domingo en el cruce entre el núcleo de Palmanyola y la carretera de s’Esglaieta para denunciar, un año más, el cierre del histórico camino de Passatemps y exigir a las instituciones, principalmente el ayuntamiento de Bunyola y el Consell de Mallorca, que abandonen las «inacciones y complicidades silenciosas» con los usurpadores del patrimonio público para empezar a «actuar en consecuencia» a favor de la «recuperación, mantenimiento y conservación» del camino, un «bien público catalogado e incluido en el GR221 de la Ruta de la Pedra en Sec».
El acto reivindicativo, organizado por las entidades Gadma, plataforma Camins Públics i Oberts, la asociación de vecinos de Palmanyola y el Lobby Bou, formaba parte de una convocatoria celebrada a nivel nacional, en el marco del IV Día de las Vías Pecuarias y los Caminos Públicos, con más de 50 acciones en toda la geografía española.
El acto celebrado en Palmanyola, a pocos metros de uno de los antiguos accesos del camí de Passatemps que conduce a la finca pública de Raixa y que permanece totalmente condenado con un muro de ‘paret seca’ y árboles, ha consistido en una concentración de protesta en la que se han recogido firmas a favor de la apertura de la histórica ruta, «una de las puertas de entrada a la Serra de Tramuntana», y ha concluido con la lectura de un manifiesto enfrente del acceso cerrado del camino. Han acudido numerosos vecinos y vecinas de Palmanyola y Bunyola, así como caballistas y activistas procaminos de otros municipios de Mallorca.
Vigilancia a los concentrados
Los organizadores han descartado que el acto reivindicativo fuera, como en otras ocasiones, una excursión por el camino para no entrar en conflicto con las propiedades de s’Heredat y Biniatzar, ya que han recordado que la caminata de 2022 se saldó con denuncias penales que han supuesto una condena contra un vecino de Palmanyola por su «papel activo» en la marcha. Este domingo, varios guardias de las citadas fincas privadas vigilaban de cerca, detrás de las barreras, las acciones de los concentrados, que en ningún momento han llegado a entrar en sus propiedades a través del camino de Passatemps.
Durante la concentración, los presentes han tenido la oportunidad de colaborar en la campaña de recaudación de fondos a favor de Juan Oliver, el vecino condenado, para hacer frente a los gastos judiciales que ha tenido que afrontar para defenderse en el citado juicio penal.
Al finalizar la concentración, la Guardia Civil ha cortado la carretera de s’Esglaieta durante unos minutos para que los presentes pudieran ocuparla con motivo de la lectura del manifiesto, leído por una vecina de Palmanyola frente al acceso cerrado del camino de Passatemps. «El objetivo principal es tener un acceso operativo y sostenible como puerta de entrada a la Serra de Tramunana desde Palma, Son Sardina, Palmanyola y Raixa», ha explicado.
Además del camino de Passatemps, los convocantes han denunciado que en el municipio de Bunyola existen otras rutas como Comassema, Biniforani o Es Cabàs que también han sido usurpadas sin ninguna consecuencia legal para los responsables. «Todos sabemos que el ayuntamiento de Bunyola todavía tiene la obligación de inventariar los caminos públicos desde hace años», han apuntado antes de reclamar la «implicación» del Consell de Mallorca: «Es una vergüenza que a día de hoy tengamos tantos caminos públicos usurpados».
El manifiesto insta a todas las administraciones competentes a aplicar la Ley de caminos públicos y rutas senderistas de Mallorca y Menorca para «evitar la apropiación y el deterioro de los caminos, así como servir a la ciudadanía, a los vecinos y al interés general» y para «actuar de forma inmediata ante usurpaciones y abandonos del bien público local como es nuestro patrimonio viario y supramunicipal».
También exigen una «justicia real e imparcial con fiscales y jueces especializados en este tipo de robos» del patrimonio público.
Un topónimo documentado a mediados del siglo XIV
En el lugar donde se han concentrado los vecinos la organización ha instalado un gran panel con la historia del «antiquísimo» camino de Passatemps, definido como «la vía principal de Son Sardina» que viene de Palma y sigue en dirección norte hacia la Font de Mestre Pere, Son Termens y s’Heretat antes de llegar a Raixa. Por ello, en algunos documentos «aparece denominado como Camí de Raixa».
El topónimo Passatemps aparece documentado ya en el año 1357 en referencia al molino de agua homónimo, situado sobre la Síquia de Canet o d’en Baster. Además, a partir del siglo XVI «el camino se documenta en muchísimas ocasiones». Hoy en día, este camino histórico está cortado a su paso por varias grandes fincas.