A Mediodía contra Putin. Con esta consigna, los seguidores de Navalni llamaron a la protesta, consistente en acudir en masa a los colegios justo a esa hora. Es la única forma de mostrar descontento sin consecuencias. Así que las aglomeraciones que no hubo en las dos jornadas anteriores, se han visto hoy sobre todo en Moscú y Sn Petersburgo. Hay miedo a rechistar visto cómo se las gasta el régimen en un proceso cuyo resultado está cantado. Los rusos en el exterior han protestado de igual manera ante las distintas embajadas y consulados. En la de Berlín, ha acudido la viuda de Navalni, el único que hubiera podido derrotar hoy a Putin.