Alberto González Amador, novio de Isabel Díaz Ayuso, se encuentra bajo la lupa de la Fiscalía debido a presuntas irregularidades fiscales y otras acciones ilícitas. En un intento por realizar una amplia reforma en su lujosa residencia de Madrid, González Amador se vio obstaculizado cuando el Ayuntamiento rechazó su solicitud tras descubrir «inexactitudes, falsedades u omisiones» en los documentos presentados para autorizar la obra, según ha podido confirmar ElPlural.com.
Según lo detallado en la resolución obtenida por este medio, las modificaciones propuestas, para las cuales González Amador emitió una declaración responsable el 4 de agosto de 2022, incluían la demolición de paredes interiores, sistemas de saneamiento, fontanería y electricidad, así como la eliminación de revestimientos de suelos y paredes, y los enseres de los baños y la cocina, junto con la remoción de los falsos techos.
Almeida debe explicar si el Ayuntamiento de Madrid ha inspeccionado el piso donde vive Ayuso para comprobar que las obras efectivamente se paralizaron o realizar la inspección inmediatamente de ese piso y del ático de encima.
¿De qué más chanchullos se ha beneficiado Ayuso? https://t.co/hTo82R4sXx
— Rita Maestre 🌾 (@Rita_Maestre) March 16, 2024
Ante esta situación tan controvertida, la líder de Más País, Rita Maestre, se ha expresado con contundencia en la red social X: «Almeida debe explicar si el Ayuntamiento de Madrid ha inspeccionado el piso donde vive Ayuso para comprobar que las obras efectivamente se paralizaron o realizar la inspección inmediatamente de ese piso y del ático de encima. ¿De qué más chanchullos se ha beneficiado Ayuso?», ha indicado.4
Otro asunto turbio en la vida del novio de Ayuso
Alberto González Amador está siendo investigado por la Fiscalía debido a presuntas irregularidades fiscales y fraude. Su intento de llevar a cabo una amplia reforma en su residencia de lujo en Madrid fue detenido por el Ayuntamiento, que encontró inconsistencias en la documentación presentada. La resolución emitida revela que las modificaciones propuestas incluían la demolición de diversas estructuras y sistemas en la vivienda.
El Ayuntamiento ordenó la paralización inmediata de las obras y la restitución de la situación anterior. Además, González Amador fue advertido de que la paralización persistirá hasta que se corrijan los incumplimientos y se obtenga la aprobación correspondiente. Se destacaron normas incumplidas relacionadas con la gestión de residuos de construcción y demolición, incluyendo la presentación de un Estudio/Plan de Gestión de Residuos y el cumplimiento de normas específicas establecidas por el Ayuntamiento de Madrid.
La resolución también detalla que González Amador debe seguir ciertos parámetros durante la reforma, como la estimación de la cantidad y tipo de residuos a generar, así como el depósito de una fianza proporcional al volumen de residuos. Se requiere una justificación detallada en caso de discrepancias en las estimaciones. Además, se menciona que las solicitudes parciales de obras deben tramitarse exclusivamente mediante el procedimiento de licencia urbanística y que una declaración responsable no puede modificarse durante un período de tiempo determinado.
Este incidente agrega más presión sobre González Amador y Ayuso, ya que se enfrentan a escrutinio público y legal. La investigación en curso y las irregularidades descubiertas en el proceso de reforma plantean serias preguntas sobre la conducta y la integridad de los implicados.