El presidente de Kenia, William Ruto, ha prometido este miércoles al Gobierno de Estados Unidos que su país liderará la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití, en el momento en el que se establezcan las autoridades de transición tras la dimisión del primer ministro haitiano, Ariel Henry, ante la ola de violencia que ha dejado la capital, Puerto Príncipe, bajo control de grupos armados.
Ruto ha mantenido una llamada telefónica con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, para abordar la «evolución de la situación» en Haití, que ha obligado a retrasar el despliegue de la fuerza policial keniana que iba a abanderar la misión.
«Le aseguré a Blinken que Kenia asumirá el liderazgo de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad de Naciones Unidas en Haití para restablecer la paz y la seguridad en Haití tan pronto como el Consejo Presidencial (de Transición) esté en funciones según el proceso acordado», ha indicado el mandatario keniano a través de su perfil en la red social X.
Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, ha señalado que el enfoque de esta conversación ha sido la discusión sobre «el rápido despliegue de la misión», incluyendo los «próximos pasos inmediatos para facilitar» este proceso.
«Blinken y Ruto han subrayado la expectativa manifestada por el Consejo de Seguridad de la ONU de que la misión se despliegue lo antes posible para prestar apoyo a la Policía Nacional de Haití. El secretario (de Estado) ha puesto a Ruto al corriente de los compromisos contraídos por Estados Unidos y otros socios internacionales para apoyar la misión», ha indicado.
En la víspera, las autoridades kenianas anunciaron el retraso del despliegue, alegando que había «habido un cambio sustancial de las circunstancias tras la dimisión del primer ministro» y argumentando que esperarán a que haya una nueva administración para finalizar los preparativos.
Henry anunció en un discurso a la nación su dimisión, presentada poco antes ante el Consejo de Ministros, en medio de la ola de violencia que ha escalado en los últimos días y que no le ha permitido volver al país, ya que coincidió con una gira oficial internacional. El Gobierno actual se mantendrá hasta el nombramiento de un nuevo Consejo Presidencial, que elegirá a un primer ministro interino.
La dimisión del jefe de Gobierno haitiano tuvo lugar tras una reunión de emergencia de la Comunidad del Caribe (Caricom) con delegaciones de otros países como Estados Unidos o Francia en la capital de Jamaica, Kingston, que trataban de buscar una «salida» a la actual crisis política.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el envío de una fuerza internacional de seguridad a Haití en una decisión calificada de histórica y solicitada por el propio Gobierno haitiano en un intento por frenar la violencia de las bandas criminales.