La legislatura se adentra en una nueva fase marcada por una incertidumbre todavía mayor. Sin Presupuestos para 2024 y a expensas de cómo afecten a la gobernabilidad los resultados de las elecciones catalanas. Estos comicios se vislumbraban como la prueba de carga de la legislatura y ese horizonte se ha hecho realidad antes de atar los primeros Presupuestos Generales del Estado. Tras decaer este miércoles las cuentas de la Generalitat, Pere Aragonès ha decidido adelantar los comicios para el próximo 12 de mayo. ERC sumó los votos del PSC, pero el rechazo de los Comuns por mantenerse el macroproyecto urbanístico del Hard Rock, provocó el fracaso de las cuentas y la consiguiente convocatoria electoral. Un escenario que ha obligado al Gobierno a renunciar a los Presupuestos para 2024. El apoyo de ERC y Junts pasó de presagiarse como cercano a descartarse.