Todo estaba abierto. El 1-1 del Philips Stadion dejaba todo por decidir en el Signal Iduna Park, que se convirtió en un infierno teñido de amarillo para empujar al Borussia Dortmund a los cuartos de final. Y aunque parecía que podía ser un festival de los locales, el PSV Eindhoven acabo cayendo peleando hasta el final (2-0). Jadon Sancho, que ha recuperado la sonrisa en Alemania, y Marco Reus, el gran actor secundario del equipo de Terzic, sellaron el billete a los cuartos de final de la Champions League.