El Sindicato Médico y el Colegio de Médicos de la Región de Murcia se han unido a la conmemoración del Día Europeo contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario.
Personal sanitario guardaba un minuto de silencio en la puerta del centro de Salud de Moratalla, en memoria de la residente de Medicina Familiar y Comunitaria, María Eugenia Moreno, que era asesinada a tiros por un paciente, mientras realizada una guardia en el Suap de ese mismo centro, el 11 de marzo de 2009, hace ahora quince años.
Esta concentración también ha servido para condenar todas las agresiones a personal sanitario que, desde ese día, se hicieron más visibles y que han ido en aumento durante los últimos años
Esta concentración también ha servido para condenar todas las agresiones a personal sanitario que, desde ese día, se hicieron más visibles y que han ido en aumento durante los últimos años. La vicepresidente del Sindicato Médico, Soledad Guillén, puso de manifiesto que «el objetivo es dar visibilidad al problema y solidarizarnos con los compañeros que sufren agresiones a diario, así como pedirle a la sociedad que sean respetuosos».
Los profesiones sanitarios piden a la administración, que de oficio denuncien al agresor, «que no tenga que ser el profesional que ha sido agredido y que no está en condiciones el que tenga que personar en la Guardia Civil o Policía Nacional», incidiendo en este sentido que «somos trabajadores del Servicio Murciano de Salud, no trabajadores por cuenta propia, pedimos que nuestra administración sea la que dé la cara por nosotros».
Aumento de agresiones
En el año 2023, se denunciaron un total de 587 agresiones a profesionales sanitarios. En este sentido, destacó Guillén que «se producen muchas más, porque no todo el mundo denuncia, la mayoría se quedan sin denunciar ante las autoridades», subrayó Soledad Guillén. Las agresiones se registran de manera diaria y el SMS comunica las estadísticas, en proporción este 2024 está siendo un año con mayor índice de denuncias de agresiones a personal sanitario. Según destacaron, «está habiendo una media de denuncias semanal entre las 15 y 20 agresiones en este 2024».
Según destacaron, «está habiendo una media de denuncias semanal entre las 15 y 20 agresiones en este 2024»
Más protección
Los profesionales siguen pidiendo más protección, medidas que garanticen su seguridad en el entorno laboral y campañas de concienciación sobre este grave problema, que se ha convertido en un compañero de consulta y en una realidad casi normalizada. Desde el Sindicato Médico, insisten, por ejemplo, en que solo 4 de los 12 centros de salud del área 7 disponen de seguridad y el CCU tampoco dispone de medidas de seguridad. «Está claro que cuando que la figura del guardia de seguridad supone una medida disuasiva para el agresor», explicó la vicepresidenta.
Sólo 4 de los 12 centros de salud del área 7 disponen de seguridad y el CCU tampoco dispone de medidas de seguridad
Ante el incremento de las agresiones y en una fecha señalada como la de hoy, Sindicato Médico y Colegio de Médicos se han unido para promover la creación de un órgano que monitorice y establezca estrategias contra las agresiones, permaneciendo alerta para conseguir el objetivo de cero agresiones.
Aunque el lugar de la convocatoria principal de concentración ha sido Moratalla, las imágenes de sanitarios reunidos a puertas de centro de salud y hospitales se ha repetido en municipios de toda la Región, sumándose así al lema de “Stop Agresiones” y “Stop Violencia a Sanitarios”, repetidos cada vez de marzo para reivindicar el fin de la violencia en el ámbito sanitario.
Manifiesto Moratalla contra las agresiones 12M2024
Ayer, 11 de marzo, se cumplieron 15 años del asesinato de nuestra compañera la Dra. María Eugenia Moreno a manos de un paciente cuando trabajaba en el centro de salud de Moratalla, tenía tan solo 34 años, un hijo de apenas 2 años y una familia truncada para siempre. Su asesinato supuso un duro golpe para todos. No pudimos evitar su muerte, pero si debemos conseguir que sea la última. Mucho ha llovido desde entonces y hemos ido a peor: cada día se ejerce más la violencia contra los sanitarios y, sobre todo, contra los médicos.
La violencia en el ámbito sanitario es un tema que nos perjudica a todos. Y digo a todos porque los principales damnificados NO solo son los agredidos, sino también los propios usuarios de la Sanidad.
Cuando se agrede a un sanitario, estamos destruyendo la Sanidad, esa de la que todos estamos tan orgullosos. Por este camino solo vamos a encontrar más violencia, más deterioro de este bien tan preciado y lo más grave, más desmotivación de profesionales que no vuelven a ser los mismos tras una agresión.
La violencia menoscaba al profesional que la recibe y altera un bien esencial como es la relación médico-paciente.
El Servicio Murciano de Salud y la Consejería de Salud tienen la obligación de proteger a sus trabajadores, poniendo a su alcance todos los medios preventivos y de seguridad que existan, pero actualmente no es así, todavía hay centros de salud en el área 7 que no disponen de guardia de seguridad; solo disponen de seguridad 4 de los 12 centros del área 7. Tampoco tienen guardia de seguridad en el CCU, cosa que también reivindicamos.
El sindicato médico lleva años pidiendo cámaras de seguridad en los centros, doble puerta en consulta, botón físico enlazado con vigilante de seguridad, prevención de agresiones en avisos a domicilio
El sindicato médico lleva años pidiendo cámaras de seguridad en los centros, doble puerta en consulta, botón físico enlazado con vigilante de seguridad, prevención de agresiones en avisos a domicilio, aunque lo más importante son las medidas preventivas, y así evitaremos el desgaste que supone una agresión para el profesional.
Los agresores actúan con total impunidad y los jueces les imponen penas irrisorias. No obstante, hay que denunciar cualquier acto violento y pelear para que el agresor sea castigado y que sean los gerentes los que eleven las denuncias. Porque lo que no se denuncia, no ha pasado.
Casi 600 profesionales registraron agresiones en 2023 en la Región de Murcia, un 56% más desde la pandemia. No podemos seguir trabajando así. ¡Basta ya!