El GP de Catar fue la primera toma de contacto en carrera de Jaume Masià con la Moto2. El campeón de la pequeña cilindrada demostró su destreza de principio a fin, aunque el resultado no fue el esperado. El de Algemesí, que salía 22º en parrilla, completó el fin de semana dentro de la categoría intermedia peleando constantemente por posiciones y finalmente terminó 25º.
Pirelli en el punto de mira
El desgaste inusual de los neumáticos Pirelli arruinó la carrera del piloto del Pertamina Mandalika, aunque no fue el único que sufrió la ‘sorpresa Pirelli’ en Losail. La entrada de los nuevos neumáticos se convirtió en el factor clave del mundial de Moto2 en la primera carrera de la temporada. Una posición por detrás de Masià terminó el valenciano Álex Escrig, otro de los perjudicados que tuvo que pasar por boxes con su Forward para cambiar la goma trasera. Fermín Aldeguer, pupilo de Héctor Faubel y uno de los candidatos favoritos a optar por el título, ni siquiera pudo puntuar terminando en la 16ª posición. No hay que olvidarse del ‘poleman’ Arón Canet, que tras una complicada salida logró volver a la posición de líder, pero rápidamente se quedó sin gomas para acabar 10º. Izan Guevara (Aspar Team) directamente abandonó.
La reacción de Masià
A pesar del resultado y de las complicaciones, el piloto valenciano asumió de manera constructiva su posición en carrera y ya mira hacia el GP de Portugal que se disputará el fin de semana del 24 de marzo: “Una pena porque me he encontrado con algunas dificultades que no me han permitido conducir a gusto. En definitiva es la primera carrera y mi primera toma de contacto en la categoría. Poco a poco iremos encontrando nuestro camino.”
