El embajador ruso en Madrid, Yuri Klimenko, ha negado rotundamente que Rusia haya interferido en ningún momento en Cataluña, asegurando que su país está interesado en que se mantenga la «integridad territorial» de España, al tiempo que ha calificado de «infundadas» las acusaciones de supuestos contactos de ciudadanos rusos con dirigentes independentistas.