Todavía con el susto en el cuerpo por la lesión de Mouctar Diakhaby, pero con el equipo enchufado, las ganas de dedicarle la victoria y una situación clasificatoria muy cómoda, Rubén Baraja compareció en sala de prensa antes de recibir al Getafe en Mestalla. Con la permanencia sellada, la gran pregunta sigue girando alrededor de las metas que ha de ponerse el equipo a pesar de las estrecheces de su plantilla. El Pipo volvió a llamar a la calma y a ir paso a paso en ese sentido: «Hay que marcar unos objetivos razonables con la situación el club. El de esta temporada pasaba por mejorar los números del año anterior, mirar más hacia arriba que hacia abajo», señalaba.
Y es que cuando José Bordalás dirigió al Valencia alertó precisamente de que si el equipo no se reforzaba corría el peligro de luchar por no bajar a Segunda División, una circunstancia que finalmente se dio y el conjunto de Mestalla tuvo que salvarse en la última jornada. Baraja no entró en esos detalles e insistió en su voluntad de pensar en clave futuro: «Las experiencias anterior no las puedo valorar, no estaba aquí. Yo hablo de hacia dónde quiero ir y buscar la mejora en mi plan, pero tampoco situaciones futura», señaló.
El encuentro contra el Getafe será un buen termómetro de hacia dónde puede ir el equipo por el nivel competitivo de los azulones y por ser un rival en unas circunstancias similares. Por ello Baraja instó a sus jugadores «competir bien igual que contra el Madrid» debido a que los puntos «valen lo mismo» y no dejó pasar la oportunidad de elogiar a su rival en el banquillo: «La trayectoria de Bordalás lo dice todo, lleva muchos años en la élite haciendo buenos trabajos. Tengo mucho respeto porque se lo ha ganado día a día, paso a paso y sacando rendimiento a sus equipos», señaló.
Y es que el Pipo ve al Getafe como un equipo que «te hace daño con muy poco» y que obligará a su equipo a estar muy concentrado en los centros laterales y el balón parado defensivo: «Son todos esos detalles que en partidos igualados son la diferencia que si lo haces bien estás más cerca de ganar», analizaba, no restando peligro a los azulones por el hecho de no poder contar con Mayoral y Greenwood, sus dos estandartes principales en ataque.
Con Roman Yaremchuk recuperado, una de las grandes dudas es el centro del campo porque Javi Guerra se disputa con Hugo Guillamón actuar en el doble pivote: «Generalmente tratamos de llevar siempre la iniciativa, de buscar nosotros lo que queremos y no jugar en función del rival. Mañana elegiremos la mejor situación para el partido. A veces juega uno, juega otro, incluso los dos», señaló. También el regreso de André Almeida abre el abanico de posibilidades, aunque a juzgar por las palabras del Pipo, todavía no ingresará en el once. En defensa, por otra parte, el fijo es un Cristhian Mosquera al que Baraja elogió y del que defendió que tenía nivel para ir a la Selección Española: «La temporada de Mosquera no está pasando desapercibida para ningún técnico de Europa. Todo el mundo está pendiente de él», expuso.