El joven central ganó sus duros duelos con Muriqi y Larin

El delantero canadiense del Mallorca, Cyle Larin, disputa el balón con el defensa del FC Barcelona, Pau Cubarsí

Alejandro Garcia / EFE

Pau Cubarsí (17 años) brilló ante el Mallorca porque pese a su tierna edad se batió en duelo con templanza, potencia y seguridad con Larin (28) y Muriqui (29), los potentes puntas del rocoso Mallorca de Javier Aguirre.

Jugando entre Koundé (derecha) e Iñigo Martínez (izquierda) en una línea defensiva de tres centrales cuando Cancelo se proyectaba al ataque por el lateral izquierdo, Cubarsí no se vio nunca superado por un partido áspero y difícil de domar.

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Pau demostró que tiene nervios de acero y que sabe sacar el balón de lujo, algo que ya se sabía. Pero, lo más importante en un defensa, también mostró que es un marcador férreo y contundente, que usa muy bien su cuerpo en las refriegas y que no le teme a batirse en duelo cara a cara o a campo abierto con rivales mucho más veteranos. El último balón colgado del Mallorca lo achicó él con un voleón. Hay central para años

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