España salía del trauma del franquismo y de la difícil transición cuando este país se enfrentó al atentado más grave de su historia: la matanza de Atocha, cientos de asesinados por una organización terrorista que enseguida el gobierno de entonces atribuiría a ETA. Aquel gobierno estaba presidido por José María Aznar, del Partido Popular, que días después se enfrentaría con otro candidato, Mariano Rajoy, al Partido Socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.