El Barça encontró en València la victoria a domicilio que necesitaba (78-88) para apuntalar la segunda posición en Euroliga y mantener a raya a sus perseguidores. Los azulgrana mostraron su mejor cara en la recta final de partido y gracias a ello se deshicieron de un rival combativo que dominó ligeramente en el segundo cuarto pero no pudo igualar al final el ritmo anotador visitante.
Jan Vesely, con 21 puntos y ningún tiro fallado, lideró la ofensiva de un Barça coral que contó también con buenas aportaciones de Laprovittola y Kalinic en el último cuarto. Ricky Rubio, que volvió a la convocatoria, también disfrutó de minutos de calidad aportando buena dirección.
El Barça dominó claramente el rebote (12 capturas más) y se mostró más certero en el tiro que un Valencia irregular, muy dependiente del nivel de acierto de Ojeleye y con pocas respuestas.a
La puesta en escena del Barça hacía presagiar un triunfo sólido de los azulgrana, que rápidamente amasaron una renta de diez (6-16) tras una racha inicial de canastas de Vesely. Al Valencia le costó encontrar fluidez en ataque y apenas funcionó con balones al interior para Davies y, sobre todo, Inglis, el más productivo en el ataque ‘taronja’. Con ello, los de Mumbró consiguieron enjugar el déficit y cerrar el cuarto con empate (18-18).
Los locales tomaron el mando en el seundo cuarto, con triples de Claver y Jones rompiendo una mala racha en el tiro. El Barça no acabó de encontrar continuidad, ni con Ricky en pista dirigiendo ni con otros jugadores de segunda unidad. El 41-35 puso en alarma al equipo de Mumbrú que llegó al descanso con 42-37.
En el tercer cuarto, una canasta de Vesely y dos triples de Parker dieron al Barça el mando (46-49) abocando el partido entonces a un intercambio de canastas lejanas que no hicieron mucho por variar la tónica de igualdad hasta el 57-59 del final del período.
En el cuarto, el equilibrio se rompió por la actividad y acierto de Kalinic y la mejora defensiva azulgrana. Un dos más uno de Ricky y canastas de Willy Hernangómez permitieron a los de Grimau marcar distancias. Triples de Kalinic y Laprovittola las ampliaron hasta una máxima de 63-76 a seis minutos del final.
Al Barça le bastó con contener al rival, bajar el ritmo de partido y jugar con cabeza para mantener ese colchón que asegura el décimonoveno triunfo europeo de la temporada, necesario para mantener esa segunda posición en solitario.
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