Real Mallorca, Athletic Club y Real Federación Española de Fútbol (RFEF) abren este jueves el telón de la final de la Copa del Rey, que se disputará el próximo 6 de abril y que deja un mes de margen para llevar a cabo los preparativos de una cita que, más allá de la ilusión que despierta en los aficionados, acarreará un ingente trabajo en cuanto a organización y a la seguridad de un evento que reunirá en Sevilla a más de 50.000 personas llegadas, en su mayor parte, de Bilbao y de sa Roqueta.