182 partidos como futbolista del Levante, repartidos en siete temporadas, definen la importancia del club granota en la carrera de Róber Pier. Una etapa cerrada el pasado mes de junio de manera «cruel», como él mismo definió. El equipo se jugaba el ascenso de a Primera en el Ciudad de Valencia, ante el Alavés. Era la vuelta de la última eliminatoria del play-off, el momento decisivo. Sin goles cumplido el tiempo reglamentario, todo se iba a dilucidar en la prórroga, ya que en la ida también se había registrado un 0-0. Y entonces, un discutido penalti, con Róber Pier como protagonista, acabó con el sueño del levantinismo, y también con la trayectoria en el club del ahora central del Sporting. Este domingo regresará, por primera vez, al mismo escenario.