Meliá una de las hoteleras que este año adelantará al mes de marzo la apertura de sus hoteles vacacionales en España. El fuerte tirón de la demanda ha llevado a la cadena que preside Gabriel Escarrer a anticipar la puesta en marcha de varios de los complejos de vacaciones que tiene en el litoral peninsular así como en los archipiélagos canario y balear.
En sus resultados anuales presentados la semana pasada, la compañía atribuye la decisión a la «fortaleza de la demanda, unida a la climatología cálida» y a su «estrategia de marcas y de segmento premium y de lujo». La empresa está sometiendo a muchos de sus hoteles a un proceso de transformación hacia esos segmentos.
Con todo ese panorama, la primera cadena hotelera española ha decidido también no llegar a cerrar siquiera algunos establecimientos durante el invierno, es decir, en la temporada baja. Otros 16 hoteles «de costas peninsulares e Islas habrán abierto en marzo de forma anticipada», añade la firma.
En los hoteles vacacionales en España, Meliá dice haber mantenido durante el cuarto trimestre «la tendencia positiva del verano tanto en tarifas como en ocupación, destacando una excelente temporada en Canarias con una mayor anticipación de las ventas tour operadas y un crecimiento del cliente directo». En las islas Baleares también registró un positivo ritmo en las reservas, incrementando la estancia media y permitiendo una extensión de la temporada, en algunos hoteles hasta el mes de noviembre.
Meliá también destaca un «buen comportamiento de los mercados británico y alemán«. Además, subraya que se mantiene la fuerte demanda de habitaciones superiores, que son precisamente las que registran un mayor incremento de las tarifas. Durante este primer trimestre de 2024, el foco de sus hoteles vacacionales lo tiene puesto sobre todo en Canarias y en algunos hoteles de costa peninsular, con mejora de precios y ocupaciones.
A día de hoy, «la demanda mantiene su fortaleza, con reservas en libros que en estos momentos superan en doble dígito a las registradas en la misma fecha del ejercicio anterior, manteniendo la tendencia positiva mostrada durante todo el ejercicio 2023», detalla la compañía en su presentación de resultados anuales.
Sus datos internos le permiten anticipar ya una Semana Santa que registrará un crecimiento del 10% en ingresos respecto al año anterior. En esa ocasión, la celebración religiosa cayó en el mes de abril, que suele ser más favorable al consumo de viaje.
Además, también tienen buenas perspectivas sobre la evolución de la tarifa media que cobran a sus clientes. El Grupo prevé continuar sosteniendo el crecimiento del RevPAR (Ingreso Medio por habitación) en línea con los últimos meses. En todo caso, y pese a la subida acumulada de los precios, prevén un volumen de reservas que según las estimaciones «todavía seguirá creciendo».
En este sentido, desde Meliá expresan un optimismo prudente. El buen nivel de reservas no se queda en Semana Santa sino que se extiende también al verano «en todos los destinos». De hecho, la compañía destaca que hay ya «un creciente retorno de las reservas anticipadas y a medio plazo, frente a las de ‘último minuto’ que continúan siendo importantes».
Las estimaciones de la Meliá también señalan un importante recorrido de mejora en cuanto al factor ocupación, que cerró el ejercicio 2022 un 4,3% por debajo de la registrada en 2019.
En España, Meliá constata una evolución «positiva» tanto en sus hoteles urbanos como vacacionales en ocupación y tarifas. Entre los hoteles urbanos, la empresa subraya la buena posición de los de Sevilla (beneficiada por la celebración de los Grammy latinos), y menciona también la pujanza de ciudades como Barcelona y Madrid, seguidas por Valencia, Palma y Alicante.
En estos destinos, donde se pueden combinar los viajes de ocio y los de negocios, la empresa cuenta con seguir incrementando precios y mejorando el nivel de ocupación. En la capital de España y en la ciudad condal se beneficia especialmente de la fortaleza del negocio MICE y Corporativo o de empresa. Este último, dice Meliá, está «en fuerte recuperación».
Extensión de las temporadas
«La extensión de las temporadas tiene un impacto muy positivo no solo en los ingresos, sino en la gestión de los destinos y la reducción del impacto negativo de la sobre- concentración de la demanda en periodos muy cortos», detalla la firma balear. Asimismo, también le permite «atraer y retener al mejor talento» ya que le dan una mejor estabilidad en lo que puede ofrecer la compañía a sus empleados.
Respecto a los mercados en que opera, Meliá dice estar notando una fuerte recuperación iniciada en los mercados de China. En el Sudeste Asiático constata la solidez de la demanda hacia Bali y una mejora en Vietnam con unas ventas en libros superiores a 2023. Meliá también dice estar notando una reactivación de los viajes desde los mercados asiáticos hacia el resto del mundo.
Por su parte, la compañía tiene en general previsiones positivas para los viajes Corporativos y el de Congresos e incentivos (MICE, por sus siglas en ingles). Se trata de un segmento que registró ya un fuerte crecimiento el año pasado y ahora tiene reservas ya confirmadas para 2024 y 2025.
Mejora de resultados
La compañía superó la cifra de ingresos registrada en 2022 en un 14,8%, y la de 2019 en un 7,8%, alcanzando los 1.928,8 millones de euros. Todas las divisiones registraron un buen desempeño y contribuyeron a una mejora del 17,3% en RevPAR global.
El Ebitda del Grupo superó también las expectativas del mercado, alcanzando los 489,8 millones y el Resultado Consolidado (130,1 millones) mejoró también en un 8,3% respecto al año 2022, y superó en un 6,9% el obtenido en el último año previo a la pandemia.
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