El Valencia Basket no pudo celebrar con victoria su partido 500 en Europa y cayó ayer en su visita a Bolonia ante una Virtus superior desde el segundo cuarto a un equipo taronja que estuvo lejos de su nivel habitual en defensa y espeso en ataque. El 87-74 les cuesta también el basket-average a pesar de los 20 puntos de un Chris Jones que fue el único inspirado cara al aro.
Mumbrú sorprendió dando entrada en el quinteto inicial a un Kevin Pangos necesitado de confianza, junto a Chris Jones, Justin Anderson, Damien Inglis y Brandon Davies.
Apenas unos segundos tardó Jones en abrir el marcador con una entrada y aunque Dunston y Cordinier reaccionaron rápido, el Valencia Basket volvió a tomar la iniciativa tras un mate de Davies y dos canastas consecutivas de Anderson, que pusieron el 4-8.
Los triples se resistían hasta el momento, pero empezó un intercambio de aciertos desde el 6,75 con Pangos y Davies respondiendo a cada triple de Cordinier y Hackett, que volvió a poner por delante a los locales con un ajustado 12-11.
Ventaja de 8 puntos
Eso sí, a la fiesta faltaba por sumarse Chris Jones, quien con un 3+1 antes de dos tiros libres de Ojeleye, permitió que los taronja se pudieran con un +8 (12-20). Una diferencia, eso sí, que no lograron mantener antes del final del primer cuarto, con tres fallos seguidos de Reuvers cara al aro y con Belinelli, Zizic y Lundberg reduciendo diferencias hasta el 18-20.
El 2+1 de Jovic en la vuelta a la pista volvía a dar oxígeno a los de Mumbrú y Reuvers no tardó en desquitarse con un mate tras gran asistencias del serbio, pero el Valencia BC empezaba a tener problemas en el rebote y en la defensa del tiro exterior y Lundberg y Belinelli empezaron a castigar a los taronja desde la línea de 6,75, mientras Mickey hacía también daño en la pintura.
La confianza iba cayendo por momentos en los jugadores taronja y los puntos llegaban en cuentagotas por medio de Pradilla y Davies. Insuficientes ante una Virtus en la que Belinelli ponía el 44-42 con un triple y tres tiros libres seguidos antes del descanso.
Tocados al descanso
El Valencia BC no encontraba su habitual solidez defensiva y aunque Pangos anotó su segundo triple en la reanudación, Belinelli, Dunston y Cordinier ponían un preocupante 51-36. Un golpe anímico para los de Mumbrú, que seguían sin anotar con fluidez hasta que Jones sumó de tres para bajar de la barrera psicológica de los 10 puntos. El estadounidense, como en tantas otras veces, se echó el equipo a la espalda y en unos minutos de máxima inspiración, logró bajar la diferencia hasta el 63-55, ya con 18 puntos en su haber. Un intercambio de tiros libres entre Zizic y Ojeleye mantuvo la diferencia de ocho puntos antes del último cuarto.
Último cuarto
Polonara echó un jarro de agua fría a las esperanzas taronja con un triple en la reanudación y pese al intercambio de canastas posterior, las diferencia no disminuía. Mumbrú apostaba por una defensa en zona, pero pese a la mejora en el tiro, la Virtus seguía anotando con facilidad, manteniendo siempre una ventaja próxima a los diez puntos.
El tiempo se echaba encima y las pérdidas e imprecisiones taronja complicaban la remontada. Una misión ya imposible cuando Pajola de tres y Mickey bajo el aro pusieron el 84-69 a menos de dos minutos del final. Pajola hurgaba en la herida desde el tiro libre y la Virtus se aseguraba también el basket average particular ante un Valencia Basket que ya no pudo hacer nada para ganar un partido que el extaronja Shengelia no pudo acabar por lesión.
Mumbrú señala a la defensa
El entrenador del Valencia Basket, Álex Mumbrú, aseguró en rueda de prensa que si no son capaces de desarrollar su mejor defensa tienen problemas para competir a este nivel. «No hemos tenido nuestra mejor defensa y no podemos competir bien si nuestra defensa no está a su mejor nivel. Hemos tenido problemas de comunicación, para frenar a (Marco) Belinelli en el segundo cuarto y por momentos hemos estado blandos. No hemos encontrado nuestro ritmo y en el segundo cuarto hemos dejado de defender y ellos han anotado fácil. En el tercero hemos intentado acercarnos pero hemos mantenido los errores y ellos han anotado muy fácil», insistió.
El técnico se refirió también a las ventanas de selecciones nacionales. «Han roto el ritmo de los equipos. Hemos tenido a jugadores que han venido directos a Bolonia», recordó en referencia a Damien Inglis.