Un niño de cuatro años ha muerto en la mañana de este jueves en su domicilio de Magaluf (Mallorca), en el término municipal de Calvià, tras introducirse en una secadora. La cuidadora, al parecer, se habría quedado dormida y no se habría percatado de que el menor se había introducido en el electrodoméstico. La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer lo que se perfila como un accidente doméstico con fatales consecuencias.