La fama mundial a una edad temprana no es fácil de gestionar. Si no que se lo digan a Justin Bieber. La estrella internacional cumple 30 años alejado de la música y los focos. El ídolo de masas de toda una generación decidió bajarse de los escenarios hace poco más de un año después de algunos ‘tonteos’ con las drogas, un historial de amores polémicos, alguna que otra detención policial, una salud mental dañada y una enfermedad rara que paralizó del todo su carrera.
El cantante, nacido el 1 de marzo de 1994 en Canadá, empezó en el mundo de la música de la manera más inocente, publicando algunos vídeos en su canal de YouTube. Su infancia fue complicada. Creció junto a su madre, Pattie Mallette, que le dio a luz cuando tenía 18 años y tuvo que criarlo sin recursos. Ella se había separado de Jeremy Bieber -padre de Justin-, traficaba con drogas y había intentado suicidarse en alguna ocasión.
El peligro de la fama mundial
Su vida cambió para siempre cuando, con solo 13 años, el mánager Scooter Braun se cruzó con una de sus versiones de canciones y vio en el potencial para triunfar. No se equivocó. Después de llevárselo a los mejores estudios de grabación y reunirlo con artistas consagrados, Bieber publicó sus primeras canciones y, como por arte de magia, conquistó a la audiencia más joven y se convirtió en un ídolo de masas. Rápidamente llegó el éxito, el dinero y la cara B de una industria complicada. El fenómeno fan que se generó a su alrededor a nivel mundial no tenía precedentes y la popularidad se le fue de las manos.
La estrella del pop fue arrestada en Miami en 2014 por conducir en estado de ebriedad, sin licencia y resistirse a la detención. Los informes de toxicología revelaron que el cantante tenía Xanax y cannabis en su organismo, pero sus niveles de alcohol estaban dentro de los límites legales. Posteriormente, Bieber se declaró culpable de delitos menores de conducción imprudente y resistencia al arresto.
Polémicas
El intérprete de ‘Sorry’ se convirtió en un personaje muy polémico y criticado, especialmente entre el público más adulto, que no veía a Bieber como un ejemplo a seguir para las fans adolescentes. Entre otras, el cantante tuvo enfrentamientos con paparazzis, faltas de respeto con sus seguidoras -las incondicionales ‘beliebers’- y ofendió a algunos colectivos y países.
“Comencé a consumir drogas bastante fuertes cuando tenía 19 años y abusé de todas mis relaciones. Me volví resentido, irrespetuoso con las mujeres y enojado. Me volví distante de todos los que me amaban, y me estaba escondiendo detrás del caparazón de la persona en la que me había convertido”, confesó en 2019 en un texto en su cuenta de Instagram.
En ese momento, la relación con su madre también se resintió. “Pasamos algún tiempo sin hablar, por lo que se necesita tiempo para reconstruir esa confianza. Ahora ella vive en Hawaii, entonces es difícil, pero está mejorando. Es una mujer increíble y la amo”, confesó en la revista Billboard. Poco a poco, Bieber consiguió salir de ese infierno apoyándose en sus seres queridos, la fe y su matrimonio con Hailey Bieber.
Sus romances
Pero antes de encontrar el amor, el artista estuvo envuelto en polémicas con muchas mujeres, incluso rumores por haber pagado a una trabajadora sexual en Panamá, mientras mantenía una relación intermitente durante siete años con Selena Gomez.
Su romance con Hailey Rhode comenzó en 2015, cuando ya eran amigos, y durante una de las múltiples rupturas de Bieber con Gomez, aunque siempre negaron que su relación fuera más allá de un idilio. La pareja se separó en 2016, cuando el canadiense volvió con la cantante, y la retomaron en 2018, cuando Bieber ya puso punto y final a su complicado amor con Gomez. Para sorpresa de todos, Justin y Hailey se casaron en un juzgado de la ciudad de Nueva York en otoño de ese mismo año.
Salud mental y síndrome de Ramsay Hunt
En su documental ‘Justin Bieber: Next Chapter’, el cantante confesó que su salud mental se vio afectada al alcanzar la fama a una edad tan temprana. Incluso, el suicidio pasó por su mente. “Creo que hubo momentos en los que fui realmente suicida. El dolor era tan constante. Simplemente estaba sufriendo, así que estaba como, ‘Hombre, prefiero no sentir esto’”. Braun también aceptó que tendría que haber ayudado a Bieber con un terapeuta: “Hay un momento de tristeza por lo rápido que sucedió todo. Hay tantas tragedias que podrían haberse evitado”.
“Pasé de ser un chaval de pueblo a alguien a quien todo el mundo le decía que era genial. A quien todo el mundo quería. Y si te lo repiten muchas veces te lo acabas creyendo. No tenía que hacer nada, siempre había alguien dispuesto a hacerlo por mí, así que nunca aprendí el concepto fundamental de la responsabilidad. Tenía millones en el banco, podía hacer lo que me diera la gana y no poseía ninguna habilidad real”, confesó el artista en la misma publicación de Instagram de 2019.
El cantante superó sus adicciones y siguió en la música, hasta que la salud le pasó factura. Bieber decidió alejarse de los escenarios después de ser diagnosticado con el síndrome de Ramsay Hunt. Durante su gira Justice World Tour en 2022, el artista compartió un vídeo en sus redes sociales explicando su complicado estado. “Es a partir de este virus que ataca el nervio en mi oído y mis nervios faciales y ha causado que mi cara tenga parálisis. Como pueden ver, este ojo no parpadea. No puedo sonreír en este lado de mi cara”, explicaba el intérprete de ‘Baby’.
Adiós a los escenarios
Aunque en un primer momento pospuso algunas paradas de su gira -que iba a pasar por Barcelona y Madrid, con todas las entradas vendidas-, regresó un tiempo después con seis conciertos. Sin embargo, finalmente tuvo que cancelar todo el ‘tour’ por su estado de salud. “Realicé seis shows en vivo pero me pasó factura. Después de bajar del escenario en Brasil, el cansancio me invadió y me di cuenta de que ahora mismo tengo que hacer de mi salud la prioridad”, compartió en ese momento el artista.
Bieber ahora está recuperado de su enfermedad, pero no ha regresado a los escenarios. El cantante se mantiene alejado de la música desde ese momento. No ha publicado canciones ni ha mostrado la posibilidad de regresar a la industria. De hecho, el cantante Usher le propuso el pasado mes de febrero participar con él en su espectáculo del intermedio de la SuperBowl, pero se negró. “Justin no estaba preparado para ello, simplemente no lo sentía”, alegaron. Alejado de los focos, el intérprete está centrado en su matrimonio con Hailey, pero sus fans -incondicionales para siempre- todavía tienen la esperanza de poder volver a disfrutar de sus conciertos.