El Real Madrid desperdició la oportunidad de certificar por sus propios medios el pase a los playoffs de la Euroliga, cediendo su primera derrota en casa de la temporada en el torneo ante el Panathinaikos (86-97) tras un duelo donde fue la mayor parte del tiempo a remolque.
Afrontaba el cuadro local el partido con sus jugadores más o menos cansados después de la resaca de la conquista de la Copa del Rey en Málaga. Así, mientras unos habían tenido más tiempo para recuperarse de la euforia en sus casas, otros volvieron en seguida a la actividad con sus selecciones nacionales.
Entre estos últimos estuvo el francés Guerschon Yabusele, enchufado con Francia y también vestido de blanco. La mitad de los primeros dieciocho puntos de su equipo llevaron su firma. Y los que no hizo él se los adjudicaron entre su compatriota Fabien Causeur y el español Alberto Abalde. Mientras el Panathinaikos optaba por el juego coral, repartiendo su producción entre seis jugadores (21-13, min.8).
El ritmo anotador del bando griego era pausado pero constante. Y cuando al Real Madrid empezó a fallarle la puntería cambió el panorama. Un parcial de 2-12 entre cuartos, con un 0-7 de salida en el arranque del segundo acto, trajo el equilibrio justo antes de que Mathias Lessort llegase con el mazo.
El ‘cinco’ del conjunto visitante, que ya había soltado alguna píldora antes, hizo nueve puntos en línea en un arrebato de fiereza que incluyó dos mates de ‘concurso’ jaleados en uno de los fondos por los seguidores de su equipo desplazados hasta la capital de España. En mitad de esa emboscada, el anfitrión bastante tuvo con no morir desangrado al descanso (36-45, min.20).
Una transfusión de ánimo en el vestuario fue suficiente para que el equipo apareciese en la pista como nuevo. Le aguantó unos instantes el Panathinaikos, pero este acabó siendo arrollado por un parcial de 9-0 ‘made in France’ manufacturado por Causeur y Yabusele.
Parecía el momento ideal para el despegue de los de Chus Mateo, pero les serró las alas Lessort. El pívot, en cuyo puesto los rumores sitúan a Walter Tavares el verano que viene, siguió firme en su afán de reivindicarse ante el caboverdiano, colgándose del aro como si fuera suyo. Y además estaba Nunn, que ya en la primera vuelta en Atenas había sido un incordio. Entre uno y otro transformaron 17 de los 22 del Panathinaikos en el tercer acto (61-67, min.30).
En ese panorama, le tocaba a alguien de blanco dar un paso al frente. Quien pidió la vez en esta ocasión fue Dzanan Musa. El bosnio, relativamente camuflado durante media hora, honró el premio de MVP al mejor jugador del torneo en el mes de enero y metió doce puntos, uno detrás de otro (72-73, min.35).
Pero el rival también tenía en sus filas un gigante dormido, no uno cualquiera sino Kostas Sloukas. El base monopolizó un parcial de 0-8 que impidió abrirle la puerta al contrario y a la postre resultó decisivo para afrontar con más confianza un toma y daca final tras el cual sellaron el triunfo ayudados por Marius Grigonis.
De esta manera el Real Madrid encadena dos derrotas seguidas en la máxima competición europea por primera vez en la temporada y ve profanada una pista hasta ahora inexpugnable. Lo de su pase a los playoffs es solo cuestión de tiempo. De hecho, dependiendo de lo que hagan el viernes el Fenerbahce y el Olympiacos podría ser un hecho antes de la siguiente jornada.
Ficha técnica:
86 – Real Madrid (24+12+25+25): Campazzo (9), Causeur (13), Abalde (6), Yabusele (18), Tavares (10), -quinteto inicial-, Musa (16), Rodríguez (2), Poirier (-), Llull (-), Deck (-) y Hezonja (12).
97 – Panathinaikos Aktor Athens (18+27+22+30): Nunn (17), Grant (4), Grigonis (11), Mitoglou (8), Lessort (26) -equipo inicial-, Balcerowski (2), Sloukas (16), Juancho Hernangómez (6), Papapetrou (7).
Árbitros: Matej Boltauzer (Eslovenia), Emin Mogulkoc (Turquía) y Joseph Bissang (Francia). Excluyeron por cinco faltas personales a Nunn (min.37).
Incidencias: Partido de la jornada 27 de la Euroliga disputado en el WiZink Center de Madrid. En la previa el bosnio Dznan Musa recibió el premio que le acredita como MVP de la competición en enero. Además el Real Madrid ofreció a sus aficionados el trofeo de la Copa del Rey conquistado en Málaga y el de mejor jugador del torneo, que recibió el argentino Facundo Campazzo.