A partir de este viernes el IVA del recibo de la luz aumentará del 10% al 21% para la práctica totalidad de los consumidores domésticos. El motivo no es otro que la caída en picado que ha protagonizado el precio medio del megavatio hora (MWh) durante los últimos siete días, con un valor promedio de 5,50 euros. Esto ha llevado a la luz a cerrar febrero a una media de 40 euros en el mercado mayorista, casi la mitad que el mes anterior y tres veces menos que hace un año, lo que además se refleja en la evolución de la inflación.