El bitcoin, la criptodivisa más popular del mercado, cotiza este viernes con descensos del 1,5% hasta los 62.000 dólares. La criptomoneda está solo a un 6% de sus máximos históricos fijados en los 66.000 dólares, que logró el 20 de octubre de 2021. En los últimos cinco días, la moneda digital se dispara un 21,5% y en lo que va de año un 47,75%. En los últimos doce meses el incremento es del 178%.
La popular criptomoneda llegó a tocar este miércoles un precio de 64.000 dólares por unidad, niveles no vistos desde noviembre de 2021, tras disparar su cotización en las últimas horas. Las subidas de los últimos días llegan en un momento de grandes entradas de capital en los nuevos fondos cotizados (ETF), que aprobó este mismo mes de enero la SEC -el regulador bursátil estadounidense-.
“La demanda de bitcoin está chocando con una oferta cada vez más escasa”, apunta Zach Pandl, director de análisis de Grayscale Investments. “Los nuevos ETF de bitcoin al contado de EEUU han recaudado un promedio de 195 millones de dólares al día en febrero, mientras que la red del bitcoin actualmente produce cerca de 900 monedas por día, o alrededor de 54 millones de dólares en bitcoins, suponiendo un precio de 60.000 dólares”, comenta. “Dado que la emisión de bitcoin se reducirá a la mitad -halving-… Simplemente, no hay suficientes bitcoins para satisfacer toda la nueva demanda, por lo que la dinámica natural de oferta/demanda está elevando los precios”, subraya.
La bajada de tipos también da alas
En los últimos doce meses el bitcoin acumula una subida del 178% y es el activo que más se ha revalorizado en este período gracias a la promesa que ha hecho la Reserva Federal de Estados Unidos de rebajar los tipos de interés en tres ocasiones este 2024. En 2023, la principal criptodivisa terminó con un alza acumulada del 108%.
En los mercados un coste del dinero elevado o las expectativas de que los bancos centrales vayan a incrementar los tipos beneficia a la renta fija y penaliza a los activos de riesgo. Por el contrario, los activos con más riesgo y volatilidad -acciones tecnológicas, biotecnológicas o criptodivisas- atraen a los inversores si las políticas monetarias dejan de ser restrictivas.
En 2022, el bitcoin protagonizó el peor año de su historia al ceder un 18,4% debido a la quiebra de la criptomoneda estable -stablecoin- Terra USD y el inicio del endurecimiento de los tipos de interés para luchar contra la inflación.
La rentabilidad no puede tapar, no obstante, la volatilidad que tiene el bitcoin y el resto de criptoactivos. La capitalización actual del bitcoin se sitúa en 1,21 billones de dólares, con un volumen negociado de 50,2 millones de dólares en las últimas 24 horas, cuando lo habitual en lo que va de año es de 20 millones.
Menos emisiones de bitcoin
Los expertos de bitcoin también atribuyen las subidas al cuarto ‘halving’ que se producirá entre marzo y junio de 2024, ya que esto supone la reducción que cada cuatro años sufren los mineros de bitcoin en su recompensa. Los tres ‘halving’ que se han dado en la historia han generado nuevos máximos históricos en 12 meses, por lo que muchos inversores confían en que se repita la historia. Estas reducciones a la mitad continuarán hasta que no se produzcan nuevos bitcoins y la criptomoneda alcance un suministro final de 21 millones de tokens. Actualmente, hay alrededor de 19,5 millones en circulación.
No obstante, los bancos centrales siguen siendo muy escépticos con las criptomonedas. El Banco Central Europeo (BCE) acaba de publicar un informe en el que carga contra el bitcoin, ya que «ha fracasado» en su promesa de ser una moneda digital descentralizada global al no utilizarse para «transferencias legítimas» y su valor «sigue siendo cero».