Agricultores españoles y franceses han coincidido este miércoles en la carretera, en la concentración de tractores que corta la autopista AP-7 en la localidad gerundense a de Pontós, y se han aliado para reclamar a sus respectivos gobiernos -y también a la Comisión Europea- que articulen herramientas para la regulación de los mercados y el refuerzo de la preferencia comunitaria de los productos agrarios producidos aquí «para revertir la caída de precios en origen y hacer frente al encarecimiento de los costes de producción». El sindicato Unió de Pagesos -mayoritario en Cataluña-, la plataforma Revolta Pagesa y la organización agraria Confédération Paysanne han hecho público un manifiesto conjunto en el que pide «una revisión de la directiva europea de prácticas desleales en la cadena alimentaria que elimine todas las formas de abusos de la gran industria y la gran distribución, que aprietan al primer escalón de la cadena alimentaria, la producción agraria».
Este miércoles, como ocurrió también el martes, los agricultores han mantenido cortadas una decena de carreteras en distintos puntos de Girona y de Lleida. Ha habido concentraciones y cortes de carretera en diferentes puntos, que ha afectado a vías de acceso a Francia.
En algunos puntos, los payeses han ido abriendo los camiones que transportaban alimentos procedentes de Marruecos, con destino a los mercados europeos, y se ha adueñado de la mercancía, que han donado al Banco de Alimentos de Girona. La presidenta de esta entidad ha confirmado que de este modo han obtenido más de 5.000 kilos de verduras y frutas de producción extracomunitaria.
Los agricultores catalanes, que este miércoles han confirmado que el corte de la AP-7 en Pontós y los de la A-2 en Lleida van a prolongarse al menos hasta el viernes, intentan «forzar» una reunión con el conseller catalán de Acción Climática, David Mascort. Un portavoz de la organización Revolta Pagesa y del sindicato Unió de Pagesos, Jordi Ginebreda, que se encuentra en el este lugar, cercano ya a la frontera con Francia, ha recordado que Mascort se ausentó de la reunión mantenida el martes entre las dos partes. El conseller alegó motivos personales y recordó que el resto de su equipo sí había estado presente en la reunión.
Sobre la subida de tono de la protesta, el activista ha subrayado que en este momento la movilización «no se acaba ni jueves ni viernes». Ginebreda ha detallado que los manifestantes han mejorado su organización de turnos para aguantar más cómodamente, pero confía en que los contactos iniciados «a través de sindicatos, de partidos políticos y del entorno del sector» para reunirse con David Mascort surtan efecto. «Que se presente y dé explicaciones de qué piensa hacer sobre las peticiones que hay en la mesa y que dé alguna propuesta», ha indicado.