Los superalimentos son la mejor fuente de nutrientes a la que podemos recurrir en nuestro día a día. Mejoran notablemente nuestro organismo si los consumimos con frecuencia y bastará con introducir algunos de estos productos en nuestra dieta habitual para empezar a notar sus beneficios.
Uno de estos alimentos naturales y que tiene múltiples propiedades es la batata o boniato, más conocido como ‘patata dulce’. Contiene una gran variedad de vitaminas y minerales como el potasio, el fósforo o el calcio, siendo además una fuente importante de vitamina A, B y C. Rico en fibra y en antioxidantes, también es una espectacular fuente de energía por su riqueza en hidratos de carbono y se puede encontrar en cualquier supermercado y a un precio muy económico.
El boniato ha llegado para quedarse por sus beneficios nutritivo, digestivo, antioxidante y por su exquisito sabor. Además, favorece la salud del sistema digestivo al contener fitosterol, que tiene un efecto protector y puede prevenir y tratar las úlceras duodenales y gástricas.
El boniato tiene casi el doble de vitamina A que la patata, una vitamina que es fundamental para la visión y también para el sistema inmunitario. Algunos estudios han demostrado que las batatas moradas contenían un grupo específico de antioxidantes conocidos como antocianinas que son beneficiosos para los ojos. También tiene betacarotenos, los responsables del color anaranjado de los alimentos, que son unos aliados muy valiosos para evitar la degeneración macular y las cataratas.
¿Por qué ayuda el boniato a perder peso?
Su principal beneficio es su alto contenido en fibra dietética, que ayuda a perder peso porque la fibra es voluminosa, lo que significa que los alimentos que contienen altas cantidades de fibra dietética ocupan una gran cantidad “de espacio” en el estómago. Esto ayuda a mantener la sensación de saciedad durante un largo periodo de tiempo, lo que impide comer en exceso. Otro «plus» es su lenta absorción, que implica que se necesita mucho tiempo para que los alimentos ricos en fibra salgan del estómago y entren en nuestro tracto digestivo. Esto evita comer en exceso lo que reduce las posibilidades de ingesta de calorías y en consecuencia, el alto potencial de aumento de peso.
Bajo en calorías. Los boniatos tienen un contenido calórico relativamente bajo, lo que también es muy importante en nuestra particular cruzada para perder peso. Las patatas suelen contener unas 400-500 calorías por porción (sobre todo si son fritas), mientras que las batatas contienen 100 calorías por porción. Se trata del mejor sustituto de las patatas y de otros acompañantes, y para su uso en la cocina tan solo hace falta ponerle un poco de imaginación.
Tiene un alto contenido de agua. Nuestro cuerpo es agua, por lo tanto, responde favorablemente cuando comemos alimentos que contienen altas cantidades de agua. Y es que al igual que la fibra, el agua ocupa mucho espacio en el estómago. Por lo tanto, las batatas nos ayudarán a sentirnos llenos así evitaremos comer en exceso e incluso picar entre horas.