Flanqueado por la presidenta de la Comisión EuropeaUrsula von der Leyen, y por los jefes de Gobierno de tres países occidentales, la fe de Volodímir Zelenski en una futura victoria ante Rusia no desfallece. Pese a que el curso de la guerra atraviesa el periodo más delicado para el país eslavo, y a que su figura se halla cuestionada internamente más que en ningún otro momento, el presidente de Ucrania ha prometido este sábado, desde el aeropuerto de Gostomel, en la periferia de Kiev, escenario de encarnizados combates al inicio del conflicto hace exactamente dos años, que la contienda terminará con una paz «justa» en «los términos» que establezca su país. «Llevamos luchando por ello 730 días, y ganaremos», ha proclamado en tono firme.