Tan cierto como que la Real no jugó bien y que fue una decepcionante noche para el olvido es lo que dijo Imanol. “Todo nos ha ido en contra. Ha sido un cúmulo de cosas”. En lo futbolístico, pero sobre todo en lo físico o en cuanto a la disponibilidad de sus jugadores. Es lo que más le preocupa de cara al martes, más que la propia derrota, falta de gol, fragilidad atrás o malas sensaciones generales: el parte médico.
“A ver cuántos estamos sanos”. Esa frase del técnico define bien la situación. Con Aihen, Odriozola y Carlos lesionados y Aritz en el limbo, Imanol tiene nuevos problemas. Oyarzabal es seria duda pese a haber tocado balón este viernes. Merino y Zubeldia llegaron muy justos al partido. Ambos fueron suplentes. El navarro reconoció en rueda de prensa que había tenido molestias en el aductor y que habían gestionado sus cargas de entrenamiento y también de partido. Por eso no fue ni titular ni primer cambio. Eso sí, afirmó haber tenido “muy buenas sensaciones físicas” sobre el verde. Con Zubeldia, Imanol no arriesgó tras sufrir un golpetazo en Mallorca que le dejó mareado. Si con cinco días de margen no estaba, no estará al 100% el martes.
En el encuentro cayeron tres, que se sepa. Barrenetxea, en el minuto cinco. Notó un latigazo en la espalda y pidió el cambio. “Si nos deja tan pronto en un día importante, es porque tendrá algo”, dijo Imanol. Traoré sufrió un fuerte choque con Moreno que le llevó a pedir el cambio al descanso, aunque es el que más opciones tiene de llegar. Por último, Zakharyan tuvo una feísima caída en su última intervención y es seria duda. “No podía ni vestirse. Se hará una resonancia”. Es un parte médico de guerra. Que pidan refuerzos.
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