El exmilitar venezolano Ronald Ojeda, opositor al Gobierno de Nicolás Maduro y residente en Chile desde 2017, fue arrancado de su casa en Santiago por cuatro personas que se hicieron pasar por miembros de la Policía de Investigaciones (PDI). Se lo llevaron semidesnudo y nada se sabe de él desde hace 48 horas. El caso le ha explotado en las manos al Gobierno de izquierdas. El presidente Gabriel Boric suspendió las vacaciones y se reunió con la ministra del Interior, Carolina Tohá, el ministro de Exteriores, Alberto van Klaveren y el titular de Justicia, Luis Cordero para abordar un asunto que ha ganado una centralidad política inusitada. «Esto es un hecho de suma gravedad«, reconoció su portavoz, Camila Vallejo. La fiscalía ha tomado cartas en el asunto. El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve dijo que no se descartaba ninguna hipótesis sobre lo ocurrido.