Ni el rechazo vecinal ni los intentos de la izquierda por tumbar la iniciativa de José Luis Martínez-Almeida frenaron al alcalde de Madrid para trasladar la mascletà a la capital. Fue este domingo, en el Madrid Río que un día visualizó uno de sus predecesores. Un pacto con la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, que le ha costado al erario público 45.000 euros y que se ha granjeado todo tipo de críticas, incluso en los medios de comunicación. Gonzalo Miró, habitual en las tertulias televisivas, no dudó en atizar al regidor popular por convertir la mascletà en un acto “ideológico”.
El programa de La Roca, presentado por Nuria Roca en LaSexta, dedicó buena parte de su tertulia política a debatir sobre la controvertida iniciativa implementada por el Ayuntamiento de Madrid. La conductora del espacio, natural de Valencia y amante de las Fallas, reconoció que le iba a costar no pronunciarse sobre esta cuestión. De hecho, aseguró que nadie que sea valenciano y le guste la mascletà “se le ocurriría pensar que una mascletà tiene ideología”.
“Una mascletà no tiene ideología, pero esto se ha convertido en algo ideológico. Otra cosa es que esté bien hecho o que sea necesario, pero es inaudito que sea ideológico. Eso es lo que me sorprende”, introdujo la presentadora valenciana. No obstante, uno de sus contertulios aportó una visión completamente distinta. Gonzalo Miró rechazó el argumento de Nuria Roca, afirmando que, efectivamente, el debate de la mascletà madrileña tiene un matiz ideológico por “el lugar en el que se ha realizado”.
Mascletà “ideológica”
Miró, con una postura crítica respecto al Partido Popular y en particular del dúo que conforman José Luis Martínez-Almeida e Isabel Díaz Ayuso en Madrid, subrayó que al alcalde capitalino “le da igual” toda cuestión que tenga que ver con el medio ambiente “desde que se presentó en campaña”. El tertuliano recordó que el leitmotiv electoral del regidor era “quitar Madrid Central”. En este sentido, ha puntualizado que ha ubicado la mascletà en “el lugar donde más especies de aves hay en todo Madrid”. “Donde más va a hacer daño”, ha resumido. Por tanto, esta línea de pensamiento le induce a pensar que “sí que es ideológico”.
Pero Nuria Roca contravino la opinión de su tertuliano, destacando que las mascletàs en Valencia se hacen en todo tipo de lugares. “Cuando me dicen que se va a hacer una mascletá en Madrid, lo primero que pienso es ‘qué bien, que la gente va a poder disfrutar de una mascletá”, deslizó la presentadora de La Roca, al tiempo que puntualizaba que le encantaba la idea de que “todos pudieseis disfrutar de una mascletà”. “Lo veo en el lado positivo”, ha remachado.
Varios colaboradores del programa han compartido la visión de Miró sobre la mascletà, a excepción de Juan del Val, que se ha abonado a la opinión de su mujer. “Me parece que la polémica es completamente ficticia”, ha puntualizado el escritor y tertuliano, ante lo que Gonzalo Miró ha remarcado la escasa asistencia que ha tenido la mascletà, celebrándolo con relativa socarronería.
Así fue la mascletà de Almeida
Con el rechazo de ecologistas, vecinos y la izquierda madrileña, el Ayuntamiento celebró su mascletà este domingo, mientras el foco mediático estaba sobre los colegios electorales de Galicia. Con una duración de aproximadamente siete minutos y aderezos falleros, el evento ha contado con la presencia de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, así como otros concejales de la Ciudad del Turia. El regidor conservador, pese al acuerdo, decidió ausentarse del acto “en señal de duelo” por la muerte de dos mujeres en un incendio durante la mañana del domingo en una residencia de Madrid.
Pirotecnia Valenciana ha sido la encargada de ejecutar la pirotecnia en el Puente del Rey de Madrid Río, en la primera mascletà celebrada en la ciudad desde la década de los 80, con más de 300 kilos de pólvoras y congregando a miles de personas -delegación de Gobierno ha cifrado en 20.000 los asistentes-. El cielo de Madrid se ha teñido de humo y pólvora, transmutando los colores de la bandera de España en la de la Comunidad de Madrid y también la Comunidad Valenciana.
Protestas vecinales
En paralelo, varios grupos de personas se congregaron en los alrededores de la Glorieta de San Vicente para mostrar su rechazo ante la mascletà impulsada desde el Palacio de Correos. Bajo proclamas como “pirotecnia, asesina”, los manifestantes portaban carteles con mensajes de ‘no quiero petardos’ o ‘más empatía con el autismo de niños y adultos’. En este sentido, además de expresar su rechazo, los opositores corearon consignas tales como “asesinos” o “más sanidad y menos mascletà”.
La concejala de Más Madrid, Sara Ladra, se unió a la concentración y calificó la celebración como «una apuesta de barra de bar» entre el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y la alcaldesa de Valencia, María José Catalá.
Un activista presente en la concentración ha señalado la preocupación por el impacto en la fauna local, afirmando que «van a morir un montón de aves» y que la ‘mascletà’, con un coste de 46.000 euros, es una «idea de locos». También ha destacado la diversidad de especies de aves en la zona afectada.