Reorienta es una iniciativa innovadora que busca transformar el turismo en la provincia de Córdoba. Impulsada por CIC Batá con la financiación de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID) y el apoyo de la Universidad de Córdoba, apuesta por un modelo responsable y sostenible, alineado con los ODS de la Agenda 2030.
El proyecto está impulsado por CIC Batá y apuesta por el desarrollo de un modelo responsable y sostenible.
Reorienta busca convertir a Córdoba en un destino turístico de referencia para viajeros que buscan experiencias que valoren los territorios y a las personas. Un turismo responsable que genere beneficios para la provincia, impulsando el progreso social y económico de sus habitantes.
El proyecto ya trabaja con 115 empresas y entidades del sector turístico, agrupadas bajo el distintivo Somos WeODS, que reconoce a las organizaciones que se comprometen a integrar la sostenibilidad en su actividad, mejorando su impacto social y ambiental.
Destilería Machaquito, en Rute, es una de las empresas adheridas al proyecto Reorienta. / CIC BATÁ
En esta ocasión, viajamos desde el Valle del Guadiato hasta la Subbética cordobesa para dar a conocer dos de las empresas comprometidas con este proyecto innovador. Una de ellas es Aventurocio, que promueve actividades de turismo activo y de naturaleza en Espiel (Córdoba) y en Cazorla (Jaén). La otra es la destilería de anís y licores Machaquito, con una larga historia de 160 años desde Rute.
Aventuorcio: turismo activo y de naturaleza
Aventurocio se integró en el proyecto Reorienta “con el firme propósito de impulsar un turismo sostenible y responsable”, tal como explica su gerente, José Manuel Gómez. De hecho, desde su fundación en 2006, la empresa ha desarrollado su actividad con un “profundo respeto por el medio ambiente”.
Aventurocio realiza talleres para los escolares. / CIC BATÁ
Gómez destaca la importancia de que empresas de distintos sectores y comarcas de la provincia se unan en este camino hacia la sostenibilidad: «Si todos estamos unidos, seremos más fuertes y eso repercutirá en un futuro mejor«.
Aventurocio está presente en Espiel (Córdoba) y en Cazorla (Jaén).
Este compromiso de Aventurocio con la sostenibilidad se refleja en su trabajo diario. Aventurocio ofrece una amplia variedad de actividades para viajeros individuales y grupos, desde talleres medioambientales para escolares hasta experiencias de turismo rural y activo. Su objetivo es “sensibilizar sobre la importancia del cuidado del medio ambiente”, algo que “cada vez preocupa más” a sus clientes.
Instalaciones de Aventurocio. / CIC BATÁ
La empresa también apuesta por la igualdad de género. El 75% de su equipo estable está compuesto por mujeres, que gozan de “medidas de conciliación y flexibilidad laboral”, detalla Gómez. Además, Aventurocio colabora con colectivos con especiales dificultades de inserción laboral, “la mayoría de las cuales son mujeres”.
Machaquito: medioambiente, igualdad de género y desarrollo local
Por su parte, Machaquito se ha convertido en un faro de sostenibilidad e igualdad dentro del proyecto Reorienta. Su compromiso con el medio ambiente, la igualdad de género y el desarrollo local la posicionan como un ejemplo a seguir para otras empresas de la provincia.
Plantilla de trabajadores de Destilería Machaquito. / CIC BATÁ
El proyecto Reorienta ha sido un aliado fundamental para la empresa en su camino hacia la sostenibilidad. Su coordinador, Francisco Reyes, señala que Reorienta les ha proporcionado “las herramientas y el apoyo necesarios para avanzar en este camino». “Ha sido como un mapa para nosotros”, explica.
La empresa ruteña se ha consolidado como un faro de sostenibilidad e igualdad dentro del proyecto Reorienta.
La igualdad de género es otro pilar fundamental del compromiso social de Machaquito. La empresa apuesta por la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres en todos los ámbitos de su actividad. «Para nosotros, no hay puestos de trabajo con género», afirma Reyes. La empresa cuenta con una plantilla paritaria y ofrece las mismas oportunidades de desarrollo profesional a hombres y mujeres, ya que buscan “tener al mejor equipo”.
Lucía trabaja como quemadora en la empresa ruteña. / CIC BATÁ
Prueba de ello es la reciente incorporación de una mujer en las labores de destilación “pese a la opinión contraria de muchos hombres”. Esta quemadora “ha demostrado que el trabajo bien hecho no tiene nada que ver con el género”, apostilla Reyes.
