El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha desmarcado de los análisis de Ferraz sobre las elecciones gallegas para advertir que debe hacerse una lectura en clave nacional. Mientras los socialistas insisten en encuadrar sus malos resultados en una visión netamente gallega, rechazando cualquier impacto de la amnistía o los pactos de Pedro Sánchez con los independentistas, el barón manchego ha reclamado a la dirección de su partido una reflexión más amplia para “evitar que un ciclo se convierta en un ciclón”. Tras las gallegas, el ciclo electoral continuará con las vascas, en el segundo semestre del año, y las europeas fijadas para el 9 de junio.