El FC Barcelona está en la recta final para decidir quién vestirá al primer equipo a partir de la próxima temporada. A pesar de que el club azulgrana tiene contrato con Nike hasta junio de 2028, desde principios de año la entidad culé trabaja a para subir el valor de su camiseta y convertirla en la mejor pagada del mercado.

A día de hoy, el Barça mantiene abiertas todas las vías sobre cuál será la marca que vista a los equipos de la entidad azulgrana a partir del próximo 1 de julio. Pese a que inicialmente Nike se mostró reacia a negociar y se remitió al contrato que ya tiene firmado hasta 2028, en las últimas semanas la firma norteamericana que viste al Barça desde 1998 se ha movido y ha subido su oferta, aunque aún no llega a las cifras que están dispuestas a desembolsar otras marcas, como Puma. Asimismo, la compañía alemana ofrece un fijo mayor a la norteamericana, que condiciona una gran cantidad por bonus de títulos ganados.

La tercera vía es la que desveló el presidente Joan Laporta hace dos semanas en ‘RAC1’ y que sigue encima de la mesa es la de crear la marca propia Barça. El club ha dado pasos en esta dirección, hasta el punto que ya ha visitado varias fábricas en países asiáticos como Bangladesh y China y tiene ya conversaciones avanzadas con una de las distribuidoras más potentes a nivel mundial para asegurarse que la camiseta podría llegar a todos los rincones del mundo tras su fabricación.

Precisamente, como el Barça quiere asegurarse poder fabricar la camiseta ya para la próxima temporada (quedaría resolver un tema que no es menor que sería la penalización con Nike en caso de romper el contrato), el club necesita tener definida su elección como muy tarde a principios del próximo mes de marzo si bien Nike ya está fabricando la equipación 2024-25. Al final, decida lo que decida, el club azulgrana tiene claro que acabará aumentando el valor fijo de la camiseta y convirtiéndola en la mejor pagada del mercado, con unas cifras que pueden llegar a los 200 millones por temporada.

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