La carrera artística de Yoko Ono (Tokio, 1933) comenzó bajo las bombas de los aviones estadounidenses sobre Japón durante la Segunda Guerra Mundial. La pequeña Yoko huyó con su familia al campo, donde escaseaban los alimentos y los productos básicos, y donde, junto a su hermano pequeño, se pasaba los días mirando al cielo como una vía de escape del horror de la guerra. “Imaginábamos platos de comida en el aire y usábamos nuestros poderes de visualización para sobrevivir”, recordó en su momento la artista. “Quizás esa fue mi primera obra de arte”.