La “lluvia de sangre” de la que tanto se está hablando en los medios de comunicación es un fenómeno que conocemos ya sobradamente, aunque con otros nombres. No deja de ser la calima o lluvia de barro que se produce como consecuencia de la llegada de polvo sahariano a nuestras latitudes y que se precipita en el suelo al coincidir con precipitaciones de agua. Pero ¿por qué se llama ‘lluvia de sangre’?