La dirigente madrileña arropa a Rueda en el esprint final de la campaña e intensifica el ataque al BNG: «No hay nacionalismo sin su sicario al lado»

VIGO, 15 (EUROPA PRESS)

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha advertido de que las elecciones gallegas del próximo domingo son «trascendentales» para Galicia pero también para España, toda vez que, ha denunciado, se busca «hundir» a la comunidad en el «nacionalismo» para dar continuidad a «un proyecto de desmembramiento de España perfectamente organizado desde La Moncloa».

Ayuso se ha desplazado a Vigo para arropar en el tramo final de la campaña al aspirante popular, Alfonso Rueda, y ha lanzado este mensaje en un mitin en la Estación Marítima de Vigo, con unas 1.500 personas y al que no faltó el edil de Lalín Rafa Cuiña. Hijo de Xosé Cuiña, quien fuera conselleiro de Manuel Fraga, dejó el PP años atrás y llegó a ser regidor de su localidad natal bajo las siglas de Compromiso por Galicia.

En el acto también hubo espacio para el ‘fenómeno fan’ y una señora siguió la intervención de la presidenta madrileña con un cartel de ‘Me gusta la fruta’. Antes del candidato, Alfonso Rueda, la dirigente madrileña ha cargado contra el jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, de quien ha afirmado que ni él ni el PSOE «tienen ilusión por ganar» sino «rabia de que lo haga el PP».

«Y van a hacer lo que haga falta sin valores y sin principios. Al servicio del nacionalismo. Solo al servicio del BNG, es decir: corruptela, impunidad y poder. Eso es lo único qu eles mueve a todos», ha aseverado, antes de lanzar una advertencia: «¡Ojo con el nacionalismo, que allá donde se instala, no sale!»

Y si en el mitin ha advertido de que «no hay nacionalismo sin su sicario al lado» –«sabemos que el BNG va a ir a las europeas en una lista con unas confluencias encabezadas por un etarra», ha ejemplificado–, ha tildado a Sánchez de «caradura» con el argumento de que, «después de haber perdido España entera», aún se atreve a decir «que Alberto Núñez Feijóo se juega su futuro en Galicia».

Y ha cargado también contra el resto de fuerzas de izquierdas, empezando por la que lidera la vicepresidenta «comunista» Yolanda Díaz, muy crítica con el «cóctel» que, bajo su punto de vista, pretenden articular en Galicia para arrebatar el gobierno a los populares y del que ha enumerado varios «ingredientes».

«Comunismo de base para apropiarse del trabajo ajeno, que les encanta vivir de los demás, con una dosis de terror para infundir miedo e imponerse por la vía fácil, bien aderezado con el nacionalismo para construir falsas identidades y decidir quién es buen y mal gallego. Y unas gotas de socialismo para repartir pobreza y superioridad moral, que se les da de fábula», ha agregado.

«EL BNG NO ES AMOR A GALICIA»

Ayuso ha arrancado su discurso con la clara advertencia de que estas son unas elecciones «trascendentales» y ha dejado muy claro a qué se ha desplazado desde Madrid: «a pedir a Galicia que nos apoye a España entera» porque, ha agregado, el país ya no aguanta «más nacionalistas, ni más caraduras, ni más gente que vive de todos los demás para seguir ahí».

A renglón seguido, ha proclamado que los populares van a «arrasar» el domingo para poner freno a un proyecto que «está rompiendo España, que la está arruinando y que ahora pretende extenderse en Galicia» encabezado por un presidente que «está perdiendo todo el poder en España» pero que se «agarra a lo que haga falta con tal de seguir en La Moncloa vendiendo y regalando lo que sea, aunque no sea suyo y sea patrimonio de todos los españoles».

En este punto, ha advertido que al igual que «en otros países en los que se va erosionando la democracia y se van perdiendo las libertades» pues en España hay «un gobierno que no gobierna», sino que solo «gestiona el poder», por lo que «los problemas se van amontonando». Pero sobre todo ha reprobado al PSOE como «muleta» del nacionalismo, convencida de que «la unidad de España» es lo que les «hunde».

Por ello, se ha mostrado convencida de que «necesitan dividir en futuras repúblicas: la catalana, la vasca, la navarra y, por supuesto, la gallega». Todo ello, ha agregado, con el fin de buscar «el enfrentamiento entre regiones» y de implantar «privilegios» de unas sobre otras. «El nacionalismo, es decir, el BNG, no es amor a Galicia. Es el odio a lo ajeno. No es amor a la tierra como tampoco el nacionalismo es amor a Cataluña o País Vasco, es expulsión y división», ha dicho.

«FALSA DIVISIÓN ENTRE EL HOMBRE Y LA MUJER»

Ayuso también ha cargado contra el Gobierno y contra Sánchez por ponerse «una toga» en relación a la amnistía y a los indultos a independentistas catalanes, y ha aludido a que una comisión de la Unión Europea «certificó tras una visita a Cataluña el trato que se estaba dando utilizando la lengua catalana para hacer otra vez activismo político».

«Lo mismo que han empezado a hacer amenazando a muchos médicos en Cataluña. ¿Eso es lo que queremos también en Galicia? No. Y la unión de los españoles también les hunde. De ahí todos esos problemas inventados y la falsa división entre el hombre y la mujer, diciéndonos a las mujeres como tenemos que ser mejores mujeres y cómo tenemos que conquistar nuestras metas, la división entre el rico y el pobre, entre el campo y la ciudad, la izquierda y la derecha», ha agregado.

Para Ayuso, la izquierda es especialista en los «problemas inventados» y en los «debates de broma» –ha aludido por ejemplo al debate entre «lo público y lo privado»– porque lo único que «no soportan» es «la libertad, la apertura y la alegría». Por ello, ha contrapuesto que «todo tiene que ser siempre el miedo y la desconfianza».

DEL «SUJÉTAME EL CUBATA» A LOS EUCALIPTOS

En un tono desenfadado, con el trasfondo del debate entre el AVE Lisboa-Madrid y la conexión por el norte con el país luso, Ayuso ha aprovechado para cargar contra el alcalde de Vigo, Abel Caballero. «Dice, ¿cómo nos podemos meter un poco con Ayuso? Pues voy a decir que si el AVE no llega a Vigo es culpa suya», ha continuado un monólogo en el que, simulando ser el dirigente, ha bromeado con este diciéndole a un compañero: «Sujétame el cubata».

«Amigo, por culpa de aquellos a los que se les ha quemado esta misma mañana un tren camino de Extremadura, si eso sucede, es culpa nuestra. Cemento armado, ¿eh?», ha continuado la dirigente madrileña, quien también ha sido objeto de mofa posterior en redes sociales por otra de sus afirmaciones durante el mitin, en el que aludió a la «inmensa suerte de pasear entre montes de eucaliptos» en Galicia.

En concreto, en uno de sus ataques contra el nacionalista, rememoró su aterrizaje y la «espectacular» visión del paisaje, antes de asegurar que no está dispuesta a aceptar que nadie le haga sentirse «extraña» cuando tenga «la suerte» de estar en Galicia, «de pasear entre montes de eucaliptos y entre miradores».

«¡NOS GUSTA LA FRUTA EN VIGO Y EN GALICIA!»

Encargada de abrir un mitin abarrotado, la presidenta del PP local, Marta Fernández-Tapias, quien reveló en los primeros compases de la campaña que dejaría la política tras el 18F, ha presentado entre aplausos a Díaz Ayuso. «¡Nos gusta la fruta en Vigo y en Galicia!», ha proclamado.

Fernández-Tapias ha reivindicado a Ayuso como una política «valiente» y ha instado a Rueda a prepararse porque, a partir del domingo, ha asegurado, está llamado a «escribir una nueva página de la historia de Galicia». Lo hará, ha advertido, porque la comunidad «no quiere nacionalismos».

Como telonera ha intervenido también la número dos de Rueda por la provincia de Pontevedra, la viguesa Patricia García, quien ha cargado contra la izquierda y ha afirmado que ha llegado a sentirse «atacada como empresaria». Además de poner en duda las promesas de sus rivales políticos, ha tenido un mensaje de ánimo para Fernández-Tapias.