Las principales organizaciones agrarias (Asaja, COAG y UPA) celebran este miércoles reivindicaciones en hasta 13 provincias de España (Sevilla, Málaga, Jaén, Burgos, Valladolid y Santiago de Compostela, Toledo, Cuenca, Palencia, Soria, Guadalajara, Granada y Madrid, incluyendo en esta última una concentración en Mercamadrid, a la que acudirán sin tractores). Hasta ahora esta es la protesta que en más lugares se ha convocado simultáneamente por parte de las grandes asociaciones del sector. Los agricultores esperan conseguir el foco mediático para poder negociar con fuerza con el Gobierno. De hecho, este jueves los representantes del campo se reunirán con el ministro del ramo, Luis Planas, tras nueve días de movilizaciones. Fuentes de estas agrupaciones indican que ya ha habido contactos previos con el Ejecutivo y también a nivel autonómico y que su objetivo es seguir todo este mes manifestándose para que se pongan en marcha medidas concretas que mejoren las condiciones de los trabajadores del campo, ahogados por la escalada de precios y la burocracia.
Las principales organizaciones agrarias se han desmarcado en todo momento de las movilizaciones alentadas desde las redes sociales y que ha capitalizado la Plataforma 6-F. «Defendemos los intereses de todos los agricultores que se están manifestando, pero no compartimos las formas ni algunos de los mensajes que se han lanzado desde la Plataforma 6-F», explica Andoni García, responsable Organización COAG. Esta idea también la ha expresado el secretario regional de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Jesús Anchuelo, que ha recalcado que, a diferencia de la Plataforma 6-F, sus movilizaciones son organizadas y están comunicadas oficialmente a las autoridades, según explicó en una rueda de prensa este martes. «Este jueves es muy importante para nosotros porque va a ser la muestra de nuestra fuerza», considera García, que califica de «muy positiva» la respuesta de sus bases durante las movilizaciones.
La principal reivindicación de los agricultores es lograr precios justos «que hagan viable el modelo de explotación familiar», mayoritario, por ejemplo, en la Comunidad de Madrid. También reclaman que se haga cumplir, por parte de todas las instituciones, la Ley de la Cadena Alimentaria, «con inspecciones y sanciones más contundentes que sirvan realmente para proteger al sector». Precisamente este miércoles se reúne el Observatorio de la Cadena Alimentaria se reúne de forma ordinaria para hacer seguimiento del sector. Los agricultores encuadrados en estas organizaciones mayoritarias advierten que las movilizaciones se mantendrán durante el tiempo que haga falta, con el horizonte de las elecciones europeas en junio hasta alcanzar un compromiso «serio, público y por escrito» del Gobierno para poner solución a los problemas del campo.
«Paralizar» Sevilla
Mientras, las organizaciones agrarias Asaja, COAG, UPA y cooperativas Agro-alimentarias han anunciado este martes su pretensión de dejar incomunicada Sevilla este miércoles con cortes en las cinco arterias de entrada y salida a la ciudad dentro de las protestas por la «grave situación» que atraviesa el sector agrario en España. Los cortes se llevarán a cabo a partir de las diez de la mañana en seis puntos de la provincia de Sevilla, tanto a pie como en tractores, y coincidirán con un paro agrario en la provincia con el objetivo de parar toda actividad en el campo y mostrar de esa forma el «descontento» de los agricultores por los «derroteros de la PAC».
Los agricultores de la provincia se van a concentrar desde las nueve de la mañana en seis puntos para posteriormente dirigirse a los lugares donde van a hacer los cortes de las carreteras: en la AP-4 (Sevilla-Cádiz) en Los Palacios; en la A-49 (Sevilla-Huelva) a la altura de Benacazón; en la A-92 (Sevilla-Huelva) a la altura de Estepa; en la A-4 (Sevilla-Madrid) en Carmona; en la A-92 (Sevilla-Málaga) en la Puebla de Cazalla y en la A-66 (Sevilla-Mérida) en Alcalá del Río. Han advertido de que las protestas se prolongarán el tiempo que haga falta, con el horizonte de las elecciones europeas el próximo mes de junio, y hasta que tengan un compromiso «serio, público y por escrito» del Gobierno central porque en las soluciones al campo están implicados varios ministerios, según el dirigente de Asaja.
Reivindicaciones «irrenunciables»
De todas las reivindicaciones que los agricultores reclaman, hay algunas que califican de «irrenunciables». Entre ellas están la supresión del cuaderno digital para «desburocratizar» el sistema, introducir cláusulas espejos para competir en igualdad de condiciones con los productos importados de terceros países y revisar el pacto verde europeo en defensa de un modelo donde no prevalezca solo el factor medioambiental, sino que tenga en cuenta la producción y los precios para garantizar la sostenibilidad económica de las explotaciones.
En este sentido, las organizaciones agrarias han denunciado que han inundado el mercado de cítricos o cereales de otros países sin las mismas garantías fitosanitarias y sin un control en las fronteras de los contingentes autorizados por la UE.
También demandan un plan de choque nacional con cambios en la normativa fiscal y laboral para el campo, el cumplimiento de la ley de la cadena alimentaria y ayudas frente a la sequía, entre otras actuaciones.