Las paradas de Lunin amargaron mucho al Leipzig (0-1)

El Real Madrid ganó este martes por 0-1 en su visita al RB Leipzig, gracias a un golazo de Brahim Díaz y a una destacada actuación de su portero Andriy Lunin, y se llevó así la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, que vivirán su encuentro de vuelta el 6 de marzo (21.00) en el Estadio Santiago Bernabéu.

En esta cita del Red Bull Arena, pronto empezó la actividad y a su vez apareció la polémica. A los dos minutos, tras un saque de esquina, Xaver Schlager enganchó desde la frontal una volea con la zurda que botó en el césped y cabeceó a gol Benjamin Sesko, en una mala salida de Lunin mientras la posición de Rodrygo Goes habilitaba al rematador.

Sin embargo, el árbitro bosnio Irfan Peljto consideró que un fuera de juego posicional de Benjamin Henrichs molestaba al portero merengue, pese a no estar en su campo de visión ni en la trayectoria del balón. La acción quedó anulada y los futbolistas del Leipzig protestaron poco, más allá de un aspaviento de su entrenador Marco Rose en el banquillo.

Decidieron seguir valientes, atacando con garbo ante una pareja de centrales poco compenetrada. Sesko buscó las cosquillas a la espalda de Nacho Fernández y de Aurelien Tchouaméni, hasta culminar algo más tarde otra internada por la derecha con un disparo raso que Lunin repelió.

Los pupilos de Carlo Ancelotti respondieron en un córner antes del minuto 10, primero con un cabezazo sin éxito de Tchouaméni y en la continuación con un tiro raso de Eduardo Camavinga. Pero aparte de eso, el equipo local apenas sufrió atrás durante la primera mitad, mostró velocidad al contragolpe y puso a prueba los nervios de su rival.