El FC Barcelona rescató un punto frente al Granada gracias a la portentosa actuación de Lamine Yamal. El canterano culé se convirtió en el mejor futbolista para Xavi y su talento evitó una nueva debacle en Montjuïc, donde se vieron durante muchos minutos contra las cuerdas.

Lamine Yamal se convirtió en el héroe del Barça. Su doblete fue providencial para que el Barça no acabase de vacío frente a un Granada que todavía sigue creyendo en la salvación. La perla culé rescató un punto cuando faltaban diez minutos y peor estaba su equipo.

Fue un partido completamente loco. Lamine Yamal adelantó a los de Xavi poco antes del cuarto de hora y Ricard Sánchez quitó el aliento al público de Montjuïc antes del descanso, dejando entrever lo que iba a pasar a lo largo del encuentro. 


Lamine Yamal remata a gol frente al Granada.

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Tras el descanso llegó la locura absoluta. Los nazaríes se adelantaron gracias a un tanto de Pellistri al que rápidamente reaccionó Lewandowski. Casi a continuación, Ignasi Miquel batió a Ter Stegen e hizo soñar al Granada hasta que apareció nuevamente Lamine Yamal. Un poderoso disparo del ’27’ rescató un punto insuficiente, pero que sabe casi a victoria después de todo el sufrimiento vivido.

El Barça sigue descolgándose del liderato de la liga y, tras este nuevo tropiezo, ya se encuentra a diez puntos del Real Madrid. Un empate que tampoco le vale al Granada, que tampoco es capaz de recortarle al Celta, equipo que marca la permanencia en Primera División.

Susto al descanso

El Barcelona salió con más dudas que certezas. La alta presión del Granada le hizo sufrir más de lo esperado y varios errores hicieron saltar las alarmas en la portería, donde regresaba Ter Stegen. Los nazaríes fueron incapaces de generar serio peligro y eso los locales no lo perdonaron.

Lamine Yamal se convirtió en la principal referencia de los de Xavi y comenzó a generar peligro cada vez que cogía el balón. Sirvió el gol en bandeja a Robert Lewandowski y el polaco no lo supo aprovechar. Sin embargo, antes de cumplirse el cuarto de hora de partido la perla culé culminó un gran servicio de Cancelo en el segundo palo para adelantar a los suyos.

El Granada trató de reponerse del jarro de agua fría inicial, pero sufrían en exceso en defensa. Lamine Yamal y Joao Cancelo se convirtieron en unos auténticos quebraderos de cabeza para el equipo del ‘Cacique Medina’, que era incapaz de ponerle remedio a sus galopadas por la banda.

Lewandowski tuvo el gol en sus botas en el tramo final de la primera parte tras una jugada coral del Barça que arrancó Yamal. Gündogan le cedió el esférico y, con todo favor, el polaco fue incapaz marcar tras la agónica salvada Maouassa bajo la línea. En el córner posterior a esa acción, Christensen estuvo cerca de batir a Batalla a balón parado.

Cuando ya parecía que el Barça se iba a ir por delante al descanso, Ricard Sánchez sorprendió a todos llegando desde la segunda línea para poner el empate antes del paso por vestuarios.

Festival de goles

La segunda mitad empezó con el Barça con más mordiente para evitar un nuevo ridículo delante de su público. Eso hizo que adelantasen las líneas y los de Xavi se fuesen al ataque para intentar hacer el segundo gol de su cuenta goleadora. 

Sin embargo, el primero en golpear fue el Granada. Facundo Pellistri aprovechó el mal balance defensivo de la banda izquierda culé por las continuas subidas de Cancelo, pero Ter Stegen le negó su premio. No perdonó en la segunda al rematar en boca de gol un servicio de Uzuni, que fue más listo que nadie y leyó a la perfección un rechace. Los nazaríes daban la sorpresa en el Lluis Company.

Sin tiempo para reaccionar, Lewandowski puso la igualada en el marcador tras un error de la zaga del Granada. El delantero polaco se aprovechó de una magnífica asistencia de Gündogan para batir a Batalla tras entrar como un toro por el centro del área. Se redimía así de los errores previos.

Enfrascados en esa locura absoluta, el Granada volvió a encontrar portería con suma facilidad. Prácticamente en la siguiente jugada el equipo del ‘Cacique’ Medina se ponía nuevamente por delante. Un cabezazo de Ignasi Miquel acabó con Ter Stegen introduciéndose el balón en su propia portería.

Tan solo habían pasado 20 minutos de la segunda parte, pero parecía toda una eternidad para el Barça. El conjunto culé, con un océano por delante, quiso marcharse rápidamente al ataque. Xavi introdujo primero a Fermín López y a Raphinha para buscar ese gol que le diese el empate.

Y fue Lamine Yamal el que logró igualar el encuentro con un zapatazo espectacular desde la frontal. Él robó el balón y batió a Batalla con un disparo que desató la locura en Montjuïc. Y nuevamente el partido entró en una fase de frenesí absoluto sobre el césped.

Ambos equipos tuvieron en sus botas la oportunidad de marcar el cuarto. Uzuni perdonó el Granada y Raphinha era incapaz de culminar la remontada culé en ese frenético final. El Barça se marchó con todo al ataque para lograr la épica y la llegaron a tocar con la yema de los dedos, pero finalmente todo se quedó en un reparto de puntos insuficiente para los dos.