La visita del Valencia CF siempre es un acontecimiento en Gran Canaria: al fin y al cabo, es un histórico de Primera División que, aunque está venido a menos en los últimos años, casi siempre ha estado arriba. Este año, además, llega con tres puntos más que la UD Las Palmas, por lo que una victoria amarilla les igualaría a 35 en la clasificación, lugar en la tabla en el que ni uno ni otro esperaba estar a estas alturas de la temporada, cuando todavía quedan 15 jornadas para el final. Ambos tenían por objetivo la salvación, el local porque acababa de ascender y el visitante porque no se salvó el curso anterior hasta el último partido, y casi la tienen en la mano, con los entrenadores como protagonistas del éxito y la cantera como bandera del proyecto. De alguna manera, dos medias naranjas salen a escena (20.00 horas, Movistar) en el Gran Canaria.
Ni Xavi García Pimienta ni Rubén Baraja quieren variar su discurso con la permanencia como eje central por mucho que los dos miren más hacia arriba que hacia abajo desde hace varias semanas. El Valencia, además, llega como el segundo mejor equipo en las últimas seis jornadas –por detrás del Real Madrid–, en las que cosechó cinco triunfos y una derrota, en el Metropolitano.
Pero en ese periodo de tiempo la UD, salvo el desliz de la semana pasada en Granada, donde sólo pudo empatar tras jugar desde el minuto 20 con uno más, también afianzó su alivio con las victorias frente al Villarreal y el Rayo Vallecano, y sólo sucumbió, en los minutos finales, antes tres equipos que van por arriba, el Athletic Club, el Barça y el Madrid. Llegados a este punto, sólo un triunfo separan a uno y otro, el que busca la UD ante su gente, que casi llenará otra vez el recinto de Siete Palmas, para igualarle y soñar con algo grande.
Más efectivos
Para tratar de conseguirlo García Pimienta recupera a dos efectivos: Araujo y Javi Muñoz. El mexicano regresa por fin a una convocatoria después de su sanción de cuatro partidos por propinar un cabezazo a Nacho en el derbi copero del pasado 7 de enero, mientras que el centrocampista, de los jugadores más en forma de la plantilla, tuvo que perderse la cita del Nuevo Los Cármenes por acumulación de amonestaciones. Su vuelta el once es casi segura; la del lateral derecho, no tanto.
Porque en su ausencia tanto Álex Suárez como Marvin completaron buenas actuaciones. El último en actuar ahí fue el futbolista cedido por el Real Madrid, que podría dejar su sitio a Coco, ya completamente integrado en la dinámica de grupo después de disputar la Copa África con Guinea Ecuatorial, lo que trasladaría al grancanario al lateral. En cualquier caso, las variantes con que cuenta el técnico son mayores. Sólo Aarón –sancionado–, Lemos, Benito, Curbelo y Mfulu son bajas, o sea, suplentes habituales.
Pejiño pide paso
Esta por ver si el entrenador amarillo da la oportunidad a Pejiño tras el gol del barbateño en Granada, pero si bien el extremo merece la titularidad, el tridente de las últimas semanas, con Munir, Sandro y Moleiro, parece inamovible para el estratega.
En frente, el Valencia de Rubén Baraja llega en racha y con las ideas tan claras como las tiene Las Palmas, aunque su modelo sea distinto. Mientras Las Palmas poseerá la pelota la mayor parte del tiempo, el cuadro che buscará la verticalidad para hacer daño, con Hugo Duro, que suma 10 tanto, como bandera. Javi Guerra, Fran Pérez y Yaremchuk completarán un frente de ataque temible de la media naranja de la UD.