La empresa húngara Magyar Vagon ultima una oferta pública de adquisición (opa) sobre Talgo, el fabricante español de trenes. Aunque todavía no es pública la operación, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) mantiene suspendida la cotización de la empresa, después de que en la jornada de ayer sus títulos se disparase más de un 9%. El accionariado de Talgo es diverso, aunque dos inversores, un fondo norteamericano y un vehículo familiar, controlan una parte relevante, más del 45% de la compañía en la que también participan fondos soberanos, aseguradoras y pequeños vehículos. ¿Quién está detrás del mayor fabricante de trenes español?
Trilantic Capital
Trilantic Capital es el principal accionista de Talgo, con una participación del 40,03%, valorada tras la suspensión de la cotización en más de 236 millones de euros. El fondo de capital riesgo estadounidense es el heredero del negocio de banca de inversión de Lehman Brothers, que, tras su quiebra, fue adquirido por sus antiguos directivos y un fondo de inversión luxemburgués.
El origen de su inversión en Talgo data de marzo de 2006, aunque en 2015 vendió parte de sus acciones en la salida a bolsa de la empresa. Tras declarar en el debut bursátil una participación del 32%, entre 2017 y 2022 aumentó su peso en el accionariado desde el 35% hasta el 40% actual.
La empresa de fabricación de convoyes ferroviarios no es la única inversión de Trilantic en España. En 2012, de la mano de Investindustrial, dueños de la mitad de PortAventura, compró una participación del 48% en la operadora de telefonía Euskaltel, acciones que vendieron con importantes plusvalías con la salida a bolsa de la compañía tres años más tarde. Anteriormente, entre 2004 y 2010, fueron accionistas, junto con el Gobierno vasco, de Industria de Turbo Propulsores, empresa especializada en la fabricación de motores y componentes de aviones.
Entre sus inversiones en España, destaca también la adquisición, en abril de 2017, de una participación en la empresa de ocio Pachá, la cual aún mantienen. En el mismo año, Trilantic adquirió parte del accionariado de Vertex, el antiguo negocio de bioetanol de Abengoa, que vendió en 2020 a DWS, la gestora de fondos de Deutsche Bank.
Torrblas
El segundo mayor accionista de Talgo por detrás de Trilantic es el family office Torrblas, un vehículo de inversión familiar madrileño, liderado por Ana Patricia Torrente Blasco, que tiene el 5,03% del capital social de la empresa, valorado en 31,7 millones de euros, según los registros de la CNMV. Este fondo de la familia Torrente, del que Ana Patricia controla más del 57%, irrumpió en diciembre de 2022 en el fabricante de trenes con una posición del 3,04%, que hace solo un año amplió por encima del 5%.
Además de su inversión en Talgo, cuenta con una participación del 5% en la inmobiliaria Árima, especializada en la compra, rehabilitación y alquiler de oficinas en Madrid. Según la web corporativa de Torrblas, invierten en el sector de las infraestructuras, activos residenciales, oficinas, comercial, logístico y hotelero por toda Europa y en agricultura.
Otros accionistas
Además de los mencionados, Talgo tiene un accionariado muy repartido, con presencia de pequeños fondos de inversión, aseguradoras o fondos soberanos, aunque todos con posiciones inferiores al 5%. El tercer máximo partícipe es el fondo de pensiones británico Universities Superannuation Scheme (USS), que controla el 2,98% del capital. Le siguen por detrás el fondo americano especializado en pequeñas compañías SCWF, también con el 2,98% de las acciones; la aseguradora también inglesa Aviva, con el 2,97%; la española Santa Lucía, con el 2,92%; el fondo soberano de Noruega, a través de Norges Bank, con el 2,84%; el banco de inversión americano Morgan Stanley, con el 2,41%; o una de las gestoras de fondos de pensiones más grandes del mundo, Capital Group, con el 1,82%.
Talgo fue fundada en 1942 por Alejandro Goicoechea y José Luis Oriol Urigüen. Algunos de sus herederos mantienen pequeñas posiciones en el accionariado. Por ejemplo, José María de Oriol Fabra y Carlos de Palacio y Oriol tienen el 1,28% y 0,86%, respectivamente. Por su parte, ningun familiar de la familia Goicoechea mantiene un porcentaje de acciones declarado al regulador.