El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Huesca ha cancelado una deuda de 108.00 euros que arrastraba un matrimonio oscense tras dejar de pagar la hipoteca de su casa en 2010 y arrastrar deudas con algunas entidades bancarias como Ibercaja o CaixaBank. Así lo ha estimado recientemente la Justicia con la Ley de Segunda Oportunidad en la mano al considerar que los solicitantes cumplen con todos los requisitos para concederles el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI).

El representante procesal del matrimonio, el letrado Cristian Monclús, expuso en su escrito de solicitud que los ahora beneficiarios se vieron superados económicamente a raíz del inicio de la crisis de 2008 hasta el punto de dejar de pagar la hipoteca de su casa, que acabó embargada por el banco tras declararse firme el procedimiento de ejecución hipotecaria firmado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Huesca. La vivienda fue subastada por un 70% del valor de tasación y no fue suficiente para que los desahuciados saldaran todas sus deudas con Ibercaja. En total eran 28.000 euros a los que luego se sumaron 8.600 por las costas procesales del procedimiento judicial que se saldó en beneficio del banco.

Reforma de la vivienda

Tampoco pudieron atender un segundo crédito por valor de 59.000 euros que habían contraído con York Global Finance 53 para rehabilitar el interior de su domicilio. Y todavía les constaba una cuarta reclamación de 12.600 euros con CaixaBank en relación a un tratamiento bucodental por implante de piezas dentales que, eso sí, se encontraba «atendido». De todas estas deudas se han liberado ahora al argumentar su abogado que no podían hacer frente a ellos con los ingresos mensuales que percibían: 1.100 euros (antes de embargos) por parte de uno de ellos y 463 euros de subsidio de desempleo por parte del segundo

 «Debido a la actual situación de inflación, sumado a los embargo que el matrimonio soporta de las distintas ejecuciones judiciales, se ha vuelto imposible para ellos cumplir los créditos so pena de desatender sus necesidades más básicas. Por dicho motivo se ven en la obligación de plantear el presente recurso», finalizaba el escrito presentado por Monclús ante el juzgado.