La Sección Séptima de la Audiencia de Barcelona ha procedido a archivar el procedimiento abierto contra la exdiputada de la CUP Anna Gabriel por su participación en la tramitación en el Parlament del andamiaje legal del ‘procés’, después de que la fiscalía instara el sobreseimiento libre de las actuaciones y la acusación popular que ejercía Vox en el procedimiento no se pronunciara.
El procedimiento fue remitido por el Tribunal Supremo a la Audiencia de Barcelona, una vez que Gabriel normalizó su situación judicial, tras su huida a Suiza. Pero nunca se le auguraba mucho recorrido, una vez que su compañera de la CUP Mireia Boya acabó siendo absuelta por los mismos hechos por los que ella estaba acusada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña: haber participado en la presentación en el Parlament de las leyes de desconexión.
No obstante, el Supremo remitió las actuaciones a la Audiencia barcelonesa por ser el órgano competente para juzgar, en su caso, a Gabriel una vez que ya no tenía ningún tipo de aforamiento y estar solo acusada de un delito de desobediencia, en cumplimiento del criterio marcado por el propio alto tribunal, que ya excluyó del juicio del ‘procés’, que acabó con la condena de los líderes independentistas a penas de hasta 13 años, a los que no estaban acusados de malversación. De tal forma que los miembros de la Mesa del Parlament bajo la presidencia de Carme Forcadell fueron ya juzgados en el TSJC.
Una vez en la Audiencia de Barcelona se dio traslado a las partes para que se pronunciaran sobre la procedencia de abrir juicio oral o de dictar el sobreseimiento de las actuaciones. El ministerio público optó por esta última opción, mientras que Vox ni siquiera dio respuesta al trámite judicial, lo que se entiende como una forma de desestimiento.