La Fiscalía ha solicitado a la juez de Instrucción número 49 de Madrid el sobreseimiento de las diligencias abiertas contra el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, y los mandos policiales responsables de las actuaciones frente a las protestas en la calle Ferraz. La juez inició actuaciones a raíz de una denuncia presentada por a Asociación Reivindicativa de la Memoria Histórica Raíces por el uso de gases lacrimógenos contra los manifestantes el pasado 6 de noviembre.
En respuesta al requerimiento de la juez Josefa Bustos, la Fiscalía aduce que la investigación debe ser sobreseída al no aportar la denuncia «un mínimo indicio de prueba» de la comisión de los delitos que esta asociación apuntaba por parte de Martín ni de los responsables policiales, según han informado a El Periódico de España, del Grupo Prensa Ibérica, fuentes fiscales. Se les acusaba indiciariamente delitos de disolución ilegítima de una reunión pacífica, prevaricación administrativo y delito de lesiones y delito de tortura y contra la integridad moral.
Inicialmente, al no considerar determinadas ni la naturaleza ni las circunstancias en las que podrían haberse producido los hechos denunciados, ni tampoco las personas que han intervenido, la juez consideró procedente «acordar la incoación de Diligencias Previas y practicar aquellas esenciales» a aclarar dichos extremos. Se trataba de identificar a los responsables que ejecutaron las órdenes que dieron lugar a los hechos denunciados.
Durante la jornada del 6 de noviembre con unas 3.800 personas en la protesta, los agentes de la Unidad de Intervención Policial tuvieron que intervenir, lanzando gases lacrimógenos, pelotas de goma y botes de humo, iniciando una carga contra los manifestantes que se extendió por los alrededores de Ferraz.
En un comunicado, Raíces destacó que «miembros de la policía de paisano blandieron barras extensibles de acero con las que golpearon a los ciudadanos de la manifestación, a pesar de que la normativa aplicable lo prohíbe, así como que las UIP dispararon pelotas de goma a la cara, dieron palizas en los callejones del barrio y procedieron a cometer todo tipo de abusos policiales».