Se acerca el día. España debutará este jueves ante Japón (16.30 horas/Teledeporte) en el primero de los tres partidos que disputará en este torneo Preolímpico de Soprón (Hungría). Al día siguiente se medirá a Canadá (15.30 horas) y terminará su periplo el domingo ante la selección anfitriona (17.30 horas). En juego está la participación en los Juegos de París 2024; hay cuatro equipos y sólo tres billetes, por lo que la exigencia será máxima. Con apenas tres días de entrenamientos y con algunas caras nuevas respecto al grupo que consiguió la plata en el pasado Eurobasket, como Mariona Ortiz, Irati Etxarri o la nacionalizada Megan Gustafson, la ilusión del equipo es máxima.

España llegó a Hungría el martes por la noche y este miércoles por la tarde realizó su primer entrenamiento en el Novomatic Arena, una de esas canchas pequeñas y rodadas, pero que atrapa a los aficionados por sus detalles de madera y por la proximidad entre los banquillos y la grada. Tras la práctica, el seleccionador, Miguel Méndez, analizó las claves para derrotar a un grupo incómodo como es el nipón. “Hacen muchos cambios, te obligan a tener frescura en ataque y castigan mucho los errores. Tenemos que tener cuidado y tener frescura en ataque para no pararnos y no colapsarnos. Una de las claves del partido será frenar los parciales en contra (…) Tenemos que estar atentas a esos malos momentos nuestros y esos buenos suyos, creo que son una de las claves del partido porque son especialistas en eso, en castigar errores”, insistió el gallego.

Y… ¿Qué hacer ante los nervios? “Es difícil evitarlos”, reconoció Méndez. El seleccionador subrayó que toca aceptarlos. “Jugamos para conseguir algo muy grande, y vamos a tratar de gestionarlo de la mejor manera posible. Hay muchas jugadoras que están acostumbradas a este tipo de partidos, otras que no, pero vamos a tratar de jugar nuestro juego: jugando y defendiendo como nosotras queremos. Creo que debemos poner el foco en eso y no en lo que nos jugamos. Perdonando nuestros propios errores y aceptando que habrá nervios porque estamos ante una gran competición”, indicó el técnico, que añadió que ve al equipo preparado para competir.

Una de las virtudes de las doce convocadas es su capacidad de resiliencia y la confianza cocinada a fuego lento en un grupo que se conoce desde hace años. Unos pilares a los que aferrarse para dar un golpe sobre la mesa pese a la imprevisibilidad del primer rival: “Sabemos que va a ser durísimo. Sabemos lo que nos jugamos y más ante un equipo con el que no estamos acostumbrados a jugar. Debemos ser un equipo, como lo somos siempre. Ojalá nos salgan las cosas maravillosamente y salgamos muy contentas. Pero si es menos maravillo y salen igual, también lo aceptamos”, subrayó Queralt Casas.

La escolta catalana destacó que el equipo está listo para afrontar el debut. “Sabemos de la importancia del reto. Hemos tenido tres días literalmente para entrenar y preparar un preolímpico, que es lo que es. Estamos preparadas, debemos confiar en nosotras. Al final somos un equipo que lleva muchos años jugando juntas y partimos de eso, que nos entendemos bastante. El entrenador nos transmite confianza y también debemos tener autoconfianza en nosotras mismas”.

La jugadora de Valencia Basket también habló sobre Megan Gustafson. La norteamericana con nacionalidad española se enfrenta a su primer partido oficial con la selección: “Megan se ha adaptado. No era fácil porque al final son tres días, pero se está adaptando y estamos pendientes de ella, al igual que el cuerpo técnico. La hemos visto bien y creo que se ha esforzado mucho”, zanjó Casas.

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