Doce del mediodía del 7 de diciembre, Lalo, como todos lo llaman, se despide de su hermano José. Este acaba de dejarlo en el B&B Hotel, en la zona del Centro Comercial Kinépolis (Granada). «Mi hermano Lalo llevaba unos días fuera de casa…», explica Tamara -apodada como Lala-, «y prefería descansar allí antes de volver». Entró y salió, según recogieron las cámaras. Lalo no se hospedó. «Estoy en peligro, ven a por mí», le diría a su hermano, a quien llamó de nuevo minutos después de dejarle en el hotel. «Tardó diez minutos en llegar», explica su hermana a CASO ABIERTO, «pero cuando llegó ya no lo encontró». Se llama Gonzalo Maya Cortés, tiene 45 años, tres hijas y desde hace dos meses no está.