Beatriz Trapote está cansada. Harta de que su vida personal se reduzca, en determinados casos, a la familia de su marido. El fin de semana su hija Brenda, fruto de su matrimonio con Víctor Janeiro, debutó sobre la pasarela ante el orgullo de sus padres y sus hermanos.
Pero tal y como ha contado la comunicadora a este periódico, una cita sacada de contexto fue captada por las agencias y replicada por multitud de medios. Todo porque no quiso hablar de su cuñado, Jesulín de Ubrique, de quien está cansada que le pregunten.
Beatriz Trapote niega crisis en su matrimonio
Ante los rumores de crisis en su matrimonio con Víctor Janeiro después de 18 años juntos, Beatriz responde con rotundidad. «Ni me voy a separar de mi marido ni tengo la intención, ni hay crisis ni enfado en la familia», declara a El Independiente.
La colaboradora televisiva se siente «feliz y afortunada» por la familia que tiene. «Nos compenetramos y nos respetamos muchísimo«, añade en su conversación con este periódico. «Somos una pareja que lucha por y para sus hijos», insiste Beatriz. Muy enfadada, la comunicadora había ya recurrido a las redes sociales para quejarse de que las informaciones que se habían publicado no eran ciertas.
De hecho, había compartido alguna imagen junto a su marido, Víctor Janeiro, con quien se casó en noviembre de 2013, en una boda celebrada en la finca Fuente Rey, Jerez de la Frontera.
«Valoro, respeto y admiro a mis cuñados»
Pero que Beatriz Trapote no quiera hablar de su cuñado, Jesulín de Ubrique, nada tiene que ver con la relación que existe entre ellos. «Para mí son Tito Jesús y Tita María José, ni más ni menos«, dice la presentadora. «Valoro, respeto y admiro a mis cuñados», añade.
Simplemente, Beatriz no quiso responder a unas preguntas que nada tenían que ver con su hija y su debut. «Como madre, evidentemente, es un orgullo, y me entristece que se tenga que empañar esta bonita noticia con titulares absurdos y que van rebuscando problemas familiares y/o de pareja cuando no los hay», reitera. De hecho, asegura que ya no responderá más a preguntas sobre Jesulín porque se «intentan sacar males que no hay».
La supuesta crisis surge de unas informaciones con motivo del 50 cumpleaños de Jesulín de Ubrique. Según se ha publicado, Víctor Janeiro y Beatriz Trapote no estuvieron en la fiesta, pero según dijo el hermano del torero los medios «llegaron tarde» y no les vieron.
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