No era la misión para que el Atlético recurrió a él cuando decidió ficharle, hace ahora año y medio. Axel Witsel había sido durante toda su carrera un centrocampista puro y duro. En algunos tramos, ni siquiera era un pivote defensivo tradicional, sino más bien un medio con recorrido y cierta llegada, alcanzando los cinco goles en su primer curso en el Borussia Dortmund, hace ahora un lustro.