La Junta de Fiscales de Sala analiza este martes el informe del fiscal del Tribunal Supremo Álvaro Redondo que no ve indicios para investigar por terrorismo al expresidente catalán Carles Puigdemont en la causa de Tsunami Democràtic, como propone el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón.
El fiscal del Supremo defiende que no hay terrorismo ni concurren indicios racionales de criminalidad contra Puigdemont, por lo que solicita devolver la causa de Tsunami Democràtic al juez de la Audiencia Nacional para que continúe la instrucción.
En su escrito, el fiscal repasa las acciones de Tsunami como el bloqueo del aeropuerto de el Prat y concluye que para que esos hechos sean calificados de terrorismo debe producirse un delito grave contra la libertad, lo que entiende que no ocurrió.
El informe del fiscal del Supremo va a ser estudiado por la Junta de Fiscales de la Sección Primera del alto tribunal, donde las decisiones se toman por mayoría.
Si la Junta de Fiscales lo aprueba por mayoría podría elevarlo ya a la Sala de lo Penal del Supremo, que es la que tiene que tomar la decisión de si asume o no la investigación.
En cambio, si los fiscales no avalan el informe pueden encargar que se redacte un nuevo texto con su criterio, bien al mismo fiscal o, si este no quiere, a otro que lo pueda asumir.
Tras hacer público su escrito, el fiscal Redondo ha negado que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, le haya presionado para exonerar al expresidente del delito de terrorismo en este caso, tras haber sido acusado por varios medios de comunicación de cambiar su criterio tras reunirse con él.
También García Ortiz ha negado tajantemente haber influido en la decisión del fiscal y ha reclamado a los medios que rectifiquen esa información sin perjuicio de ejercitar en su caso las acciones que resulten oportunas.