El Real Madrid se quedó con la miel en los labios. Un gol de cabeza de Marcos Llorente en el último suspiro dio el empate al Atlético en el derbi, el cual tuvo 80 minutos por delante a los de casa. Brahim, que entró al once de urgencia por unos problemas de Vinicius, abrió el marcador. Los de Simeone hacen un favor al Girona, que sigue a dos puntos de la cabeza y visita la próxima semana el Santiago Bernabéu. [Narración y estadísticas: Real Madrid 1-1 Atlético de Madrid]

La noche empezaba torcida para el Real Madrid. Vinicius se retiró antes del calentamiento y saltaron las alarmas, más aún cuando Joselu se unió al resto de jugadores blancos. Tras unos minutos de incertidumbre, se confirmó la baja del brasileño y no fue Joselu sino Brahim quien entró en su lugar.

Vinicius, con problemas en las cervicales, no jugó aunque llegó a calentar. Tampoco participó Rüdiger, fuera del banquillo; y sin Tchouaméni, Carvajal tuvo que hacer de parche como central en una defensa blanca en cuadro. En el Atleti, Simeone se reservó a Samu Lino y Memphis Depay en el banquillo.

[Así fueron las dos jugadas polémicas en las que el Real Madrid pidió penalti a Lucas y a Bellingham]

Brahim aprovechó la oportunidad. No había pasado ni una hora desde que se enteró de que sería titular en el derbi cuando el jugador malagueño puso el 1-0. Séptimo gol de su temporada con el Madrid y cuarta vez que abre el marcador. Era el minuto 20. La jugada se aceleró con una pared en el área y siguió con un rebote que permitió al sustituto de Vinicius definir, con pausa incluida, dentro de la zona pequeña.

El Madrid había salido al partido más enchufado. Bien fuera por la oportunidad que tenía de distanciarse en el liderato, por ganas de revancha contra los de Simeone o por puro orgullo tras el ‘palo’ del calentamiento. El plan del Atleti estaba claro: crear peligro principalmente abriendo el juego y centrando.


Brahim Díaz celebra su gol en el derbi Real Madrid – Atlético

Reuters

La ocasión más clara para los rojiblancos en la primera mitad fue de un centro al área. Cabeceó Savic y Lunin, que se precipitó en la salida de su portería, sacó una mano milagrosa. Quería aprovechar el Atleti que el Madrid jugaba con centrales no precisamente altos (Nacho y Carvajal), pero el partido le pedía más si quería remontar.

Dos amarillas casi seguidas a Saúl y Mario Hermoso y alguna oportunidad más para el Madrid, que combinó siempre bien en la zona de tres cuartos, cerraron la primera mitad. Tenía que tocar las piezas sobre el tablero Simeone y en el descanso quito a Riquelme, sobrepasado en su banda por Lucas Vázquez y Brahim. Entró Nahuel Molina en su lugar.

Polémica en las dos áreas

La polémica saltó al comienzo de la segunda parte. En un nuevo córner para el Atleti, Savic remató a gol. Lo celebró el Atleti, pero el línea vio algo que Sánchez Martínez no. Saúl se colocó en la jugada delante de Lunin, al que obstaculizó y metió en la portería, y el gol fue anulado por fuera de juego posicional del futbolista colchonero. Protestó Simeone, pero el árbitro mantuvo que la posición adelantada de Saúl influía en la jugada tras recibir la información del VAR.

Las quejas siguieron, pero en el área contraria, por dos posibles penaltis: uno a Lucas y otro a Bellingham, este último muy protestado por el Bernabéu. Prieto Iglesias no vio nada en ambas jugadas desde la sala VOR.

Simeone movió todo el banquillo e hizo tres cambios más sobre el minuto 60. Entraron Pablo Barrios, Lino y Depay y quitó a De Paul, Saúl y Morata. Y ni diez minutos pasaron hasta que llegó el quinto y último cambio rojiblanco: Correa por Koke. El Atleti, al que ni siquiera le valía el empate por la diferencia de puntos con el Madrid, se lanzaba al ataque con prácticamente cuatro delanteros. 

Ancelotti empezó los cambios quitando a Brahim y entrando al campo, ahora sí, Joselu. Brahim se fue ovacionado por el gol y porque justo cuando fue sustituido hizo una jugada maradoniana: le coló la pelota entre las piernas a Hermoso y, tras un genial recorte, rozó el que hubiera sido su mejor gol con la camiseta del Real Madrid. El malagueño se sigue consagrando como una de las revelaciones de la temporada madridista.

Llorente, el 93′ y la ‘ley del ex’

Modric, con los aplausos de siempre, también entró por Rodrygo y, en la recta final del partido, se fue Bellingham por Dani Ceballos. El inglés no tuvo demasiado protagonismo en el partido, otra vez marcado con fijación por Simeone. 

El Atleti iba a por el gol que le diera, al menos, el empate. Parecía morir el partido cuando un balón por alto silenció por completo al Bernabéu. Savic puso un centro en el minuto 93, peinó primero Depay y Marcos Llorente, también de cabeza, superó a Lunin. Los visitantes volvían a sacar un punto de la manera que mejor les ha ido en los últimos derbis: con balones al aire.

Cabezazo de Marcos Llorente para hacer el 1-1 en el derbi madrileño


Cabezazo de Marcos Llorente para hacer el 1-1 en el derbi madrileño

Reuters

Se cumplió la ‘ley del ex’ con Marcos, futbolista que sigue el legado de los Llorente empezando por su tío abuelo Paco Gento. Simeone apretó el puño, aunque el más beneficiado de la jornada es un Barça que recorta dos puntos al resto. El 1-1 llegó de la forma más agónica posible y deja al Madrid sin una oportunidad de oro para dar un golpe clave en el campeonato. La Liga sigue viva.

Real Madrid – Atlético de Madrid

Real Madrid: Lunin; Lucas Vázquez, Carvajal, Nacho, Mendy; Camavinga, Kroos, Fede Valverde, Bellingham (Ceballos, m.88); Brahim (Joselu, m.71) y Rodrygo (Modric, m.76).

Atlético de Madrid: Oblak; Marcos Llorente, Savic, Witsel, Mario Hermoso, Rodrigo Riquelme (Nahuel Molina, m.46); De Paul (Barrios, m.61), Koke (Correa, m.68), Saúl (Samu Lino, m.61); Griezmann y Morata (Memphis Depay, m.61).

Goles: 1-0, m.20: Brahim. 1-1, m.93: Marcos Llorente.

Árbitro: Sánchez Martínez (Colegio Murciano). Amonestó a Saúl (37), Hermoso (38), Koke (82), Barrios (85) y Memphis (95) por el Atlético de Madrid.

Incidencias: encuentro correspondiente a la vigésimo tercera jornada de LaLiga EA Sports, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 76.732. Se rindió homenaje al cuerpo de policía por si bicentenario, con dos representantes realizando el saque de honor, y se guardó un minuto de silencio en memoria del exmadridista Carlos Cela. Los jugadores de los dos equipos y Ancelotti lucieron brazaletes verdes en una iniciativa contra el cáncer.